Vettel, tras no pasar el corte en Q1: "Estoy disgustado y enfadado"

Sebastian Vettel ha terminado la primera clasificación de la temporada en decimoctava posición. Si bien es cierto que no cree que entrar en pánico tras el resultado de hoy le sirva de ayuda, le ‘enfada y disgusta’ que el desenlace no haya estado en sus manos.

"Si entro en pánico ahora, ¿ayudaría? Está claro que estoy disgustado y enfadado porque, en cierta manera, no ha sido nuestra culpa", ha confesado el piloto de Aston Martin en declaraciones recogidas por el portal web RaceFans.net.

Vettel cree que las circunstancias que se han dado al final de la Q1 escapaban a su control. En primer lugar, Nikita Mazepin se ha saltado el ‘pacto de caballeros’, por el que se supone que los pilotos no se deberían adelantar entre ellos llegando a las últimas curvas de la vuelta de calentamiento.

Después, el piloto ruso ha provocado una bandera amarilla en el primer sector y, momentos después, a Carlos Sainz se le ha parado el motor, lo que ha provocado otra bandera amarilla en el segundo sector. A todo esto, el tetracampeón se ha topado con ambos incidentes y ha tenido que levantar en los dos sectores.

"La vuelta de calentamiento en el último sector ha sido caótica. He conseguido cruzar la línea de meta por menos de un segundo y luego me he encontrado con dos banderas amarillas, así que no hay mucho que puedas hacer en esas circunstancias", ha explicado Vettel.

Las banderas amarillas también ha afectado a otros pilotos y, de hecho, la FIA ha iniciado una investigación al término de la clasificación para corroborar que se habían respetado, pero se ha solventado sin sanciones.

Aun así, el piloto alemán no ha querido señalar con el dedo a nadie y se ha aferrado a que las circunstancias eran muy poco favorables. Cree que todos los monoplazas han tenido que ir lentos para no sobrecalentar los neumáticos y eso les ha llevado a juntarse en poco espacio.

"Al final creo que el problema es que tenemos que ir muy despacio para poner los neumáticos a punto. Por lo que, con esa cantidad de coches en la pista, va a ser un desastre. Obviamente nadie esperaba que fuera a ir tan mal", ha aclarado Vettel.

Más allá de lo ocurrido en la jornada de hoy, el alemán mira a la carrera del domingo con optimismo. Su compañero de equipo, Lance Stroll, ha conseguido pasar a Q3 y clasificar en décimo lugar, lo que da esperanzas de que el coche tenga potencial para hacer una buena carrera.

"Tenemos que aceptarlo, hacer lo que podamos y prepararnos para mañana. Claramente creo que hay potencial para ir mucho más rápido", ha afirmado para cerrar.

UNA SEGUNDA INVESTIGACIÓN

Vettel fue investigado junto con otros tres pilotos para corroborar si habían respetado las banderas amarillas al final de la Q1 por la parada del motor de Carlos Sainz. Todos recibieron el OK de la FIA por ello.

Sin embargo, los comisarios deportivos ahora se centran en ver si Vettel ha cumplido con la normativa de la doble bandera amarilla por el trompo de Nikita Mazepin en la curva 1 al final de la Q1. Vettel tendrá que declarar mañana domingo a las 12:30 CEST. Es decir, cinco horas y media antes de la carrera.