Realista sobre sus opciones

Sainz: "Williams debe hacerlo muy mal para batirles en 2016"

Miguel Carricas
26/08/2016 12:23

Carlos Sainz entonó ayer un discurso de extrema cautela sobre el potencial del equipo Toro Rosso antes de afrontar la segunda mitad de la temporada 2016. La formación de Faenza ha logrado afianzarse como una de las fuerzas más asiduas en la batalla por la Q3 gracias a las buenas actuaciones del madrileño durante el transcurso de la gira europea, si bien la falta de recursos económicos para introducir mejoras y el enfoque inevitable hacia las nuevas reglas del 2017 vaticinan un final de año difícil en el plano deportivo. “No queda otro remedio que apretar los dientes y sufrir un poco más”, apuntaba Sainz con resignación.

Consciente de que la progresión de McLaren y Force India complica cada vez más el objetivo de ser la quinta fuerza competitiva de la parrilla, Sainz afronta las nueve próximas carreras consciente de que su talento puede ser un factor diferenciador para conseguir más puntos y mejorar la situación de Toro Rosso en el campeonato. "Espero seguir en la misma línea que en la primera parte de la temporada, siempre intentando mejorar y haciendo buenas carreras. Trataré también de hacer buenas clasificaciones, como a final de la primera mitad de la temporada, sabiendo que el coche cada vez dará menos de sí", apuntaba.

Toro Rosso trató de limitar las carencias naturales de su especificación del 2015 con un nuevo paquete de mejoras en el pasado Gran Premio de Alemania. Pese a que la sensación interna apunte al optimismo sobre la evolución del STR10, tanto Sainz como Kvyat fueron incapaces de entrar en la zona de puntos durante la carrera del domingo, una cita marcada por el progreso de Force India y la constatación de que McLaren ya es en una amenaza real en la batalla por las diez primeras posiciones. Preguntado sobre el enfoque de Toro Rosso en cuanto a la introducción de nuevas piezas, Sainz insiste en que las características de los circuitos son determinantes a la hora de valorar su competitividad.

"Sé que es difícil verlo desde fuera, pero la mejora que introdujimos en el Gran Premio de Alemania sí que funcionó. Lo que realmente no funcionó es el Toro Rosso. Era un circuito que no nos venía nada bien; era de curvas lentas, donde perdemos mucho tiempo, y encima luego venían varias rectas. Era una sucesión de curvas lentas y rectas. Igual que el primer sector de Hungría, donde el resto nos metía medio segundo en las curvas. Hockenheim tenía esas características y no nos venía bien; ojalá aquí sea otra historia, hay más curvas rápidas y esperemos no haya que quitar demasiada carga aerodinámica para poder mantener el nivel", apuntaba.

Felipe Massa destacó ayer su preocupación frente a la posibilidad de que fuerzas emergentes como Toro Rosso sean capaces de superar al FW38 en la segunda mitad de la temporada. Sainz, por su parte, cuestiona que la decadencia deportiva de Williams pueda relegarles a una hipotética séptima posición en el mundial de constructores. "Creo que no podremos batirles. Nos sacan muchos puntos; si conseguimos que no sumen puntos en estas dos carreras que les favorecen, luego les podríamos coger, y aunque nos pasase McLaren, estaría muy bien adelantar a Williams. Pero ellos tienen motor Mercedes… si acaban 7º es para matarles, muy mal se les tiene que dar la segunda mitad de la temporada".