Rémi Taffin: "Nos llevó mucho tiempo resolver los problemas"
Renault ha admitido que necesitaron demasiado tiempo para identificar los problemas que han sufrido esta temporada en su propulsor, lo que derivó en numerosos problemas técnicos para los pilotos de Red Bull y de Toro Rosso.
La marca francesa ha vivido un calvario desde la introducción de la arquitectura V6 turbo híbrida en el año 2014, y su débil unidad de potencia lleva lastrando desde hace dos años los intereses de Toro Rosso y un Red Bull que ha pasado de ser el equipo de referencia a uno de los inquilinos de mitad de tabla.
El año pasado se presentaba como una oportunidad de resarcimiento para los franceses, quienes, no obstante, volvieron a sufrir fallos en la mecánica y problemas acusados de manejabilidad, lo que impidió a Daniel Ricciardo, Daniil Kvyat, Max Verstappen y Carlos Sainz conseguir el botín de puntos que hubieran deseado.
Según ha declarado Rémi Taffin en Autosport, en Viry-Châtillon estuvieron más tiempo del planeado indagando para encontrar soluciones: "Nos llevó demasiado tiempo resolverlo. Debía haberse hecho en una carrera, pero se hico en cuatro o cinco".
La manejabilidad alrededor de las 8.000 y 9.000 revoluciones fue un problema real en el invierno
En este sentido, el francés declara que Renault erró en invierno al no percatarse de un problema en la manejabilidad del propulsor a altas revoluciones, un error que afrontaron de una manera demasiado optimista.
"Se debió a algunos de los cambios que elegimos en el software para 2015 en comparación a 2014. Ésta es una área donde realmente no nos dimos cuenta de un problema, que fue la manejabilidad alrededor de las 8.000 y 9.000 revoluciones por minuto, y éste fue un problema real durante los test de invierno".
"Tras un tiempo, pensábamos que podíamos evitarlo sin grandes modificaciones del hardware, pero demostró ser más difícil que eso. Así que, quizá, fuimos un poco optimistas en la resolución de este problema", ha asegurado.
La decisión de cambiar el hardware, reconoce Taffin, no fue la mejor que ha tomado en su vida, aunque finalmente consiguieron extraer algo de rendimiento de un propulsor que también adolecía otros problemas, como los que afectaba a los pistones.
"Elegimos hacer funcionar nuestro motor con un ejercicio de hardware diferente, que no es la mejor decisión que hemos tomado. Pero, al final, hicimos que funcionara, y eso es bueno, porque sacamos algo de rendimiento".
"Lo otro es un problema en nuestro pistón desde el principio del año, algo que no anticipamos. Hicimos el trabajo en el banco de pruebas y, en un momento dado, lo vimos, así que tuvimos que resolverlo. Es una parte bastante grande de la que cambiar el diseño, así que creo que esa fue la clave".
"Si se mira a la temporada desde arriba, podría decirse 'guau, es una temporada muy difícil'pero quizá hubo dos o tres cosas que hicieron de nuestra temporada algo distinto a lo esperado", ha declarado Taffin.
En cuanto al rendimiento, necesitamos encontrar nuestro camino. Requiere bastante tiempo
Ahora, con los problemas de fiabilidad aparentemente solucionados, Renault tiene que centrarse en encontrar el rendimiento que el propulsor puede ofrecer. Taffin ha asegurado que será una tarea complicada y que llevará tiempo, debido a los cambios en la filosofía del motor que han implementado en el último año.
"En cuanto al rendimiento, simplemente necesitamos encontrar nuestro camino. Empezamos a tocarlo por primera vez hace unos meses y requiere de bastante tiempo para implementarse".
"Cuando cambias la forma en la que piensas acerca del motor de combustión y cómo funciona con todo el resto del conjunto, tienes que pasar por demasiadas cosas para asegurarte de que tienes las soluciones correctas", ha concluido.
