Räikkönen: "Queremos ganar en Australia y podemos conseguirlo"
Un mes después de que Sergio Marchionne fijara la lucha por el Campeonato del Mundo como objetivo de Ferrari para la temporada 2016, el optimismo en torno al potencial de la formación italiana no deja de crecer en el paddock de la Fórmula 1. A esta corriente de opinión cada vez más generalizada se ha unido la de Kimi Räikkönen, quien apuesta por una importante mejora de prestaciones durante el invierno que les sitúe en disposición de aterrizar en Melbourne con serias opciones de romper el dominio de Mercedes AMG. "Queremos tener opciones de ganar en Australia, aún nos quedan dos meses", destacó ante los medios desplazados al circuito de Paul Ricard.
El optimismo del finlandés coincide con la voluntad de una mayoría autorizada en el paddock que exige más emoción en la batalla por el título tras dos temporadas marcadas por la supremacía de Lewis Hamilton y Nico Rosberg, principales rivales de la Scuderia en su intento de erigirse como la nueva referencia competitiva de la parrilla. Uno de los grandes defensores de esta idea es Bernie Ecclestone. "El dominio de Mercedes no es bueno para nadie; necesitamos que Ferrari luche con ellos", indica el británico a tenor de este asunto. Por el momento, se conocen pocos detalles sobre la arquitectura del próximo bólido rojo más allá de su apuesta por la suspensión 'pull-rod', la introducción de un morro corto y una estrecha parte trasera.
Sea como sea, Räikkonen confía en que Ferrari tenga "posibilidades reales" de vencer en la carrera inaugural de la temporada, si bien insiste en que los test invernales en el Circuit de Barcelona-Catalunya no terminarán de despejar las dudas en torno a sus aspiraciones reales de cara al 2016. "Ni siquiera después de haber completado una vuelta con el coche de 2016 podremos estar seguros", avanza el finlandés, no sin reiterar su apuesta por que el exhaustivo trabajo en Maranello será determinante para convertir la buena tendencia de resultados del 2015 en una firme aspiración al título mundial. "Creo que podemos lograrlo", apunta.
