GP de Baréin - Clasificación

La galaxia de Hamilton queda muy lejos para el resto: Pole autoritaria

Víctor Serrano
18/04/2015 18:06

En ese cielo estrellado que envuelve a la espectacular noche de Baréin hay una estrella que sobresale por encima de las demás. Una que brilla como ninguna y que guía a aquel que la encuentra. La Estrella Polar. Hoy, si centramos nuestra mirada en el asfalto del circuito de Sakhir, encontramos un homónimo terrenal del astro más centelleante. Un piloto que ha brillado con luz propia y que ha sido imposible alcanzar. El bicampeón. Lewis Hamilton.

Muchos no entendieron por qué prefirió seguir compitiendo con el número '44' en lugar del '1', ese que solo pueden llevar los campeones, cuando se proclamó leyenda en Abu Dabi. Sería demasiado insultante que también luciera ese dorsal en su coche cuando ya aparece junto a él en la mayoría de las sesiones de un Gran Premio. Esta vez, lo ha vuelto a hacer. Pero no de cualquier forma. Lo ha hecho a lo grande.

1:32.5. Unos números que significan poco sin acompañamiento, pero que con cuatro ruedas, un coche y el asfalto del Golfo Pérsico dejan la boca abierta a todo el que los mira. Parecía que iba a ser una de las luchas más ajustadas de los últimos tiempos con la amenaza de Ferrari, pero Lewis se montó en su cohete para viajar a otra galaxia. Una galaxia que deja a seis décimas a la Pole de Rosberg en 2014 y a la que nadie más ha podido llegar. Descomunal.