GP de Bélgica - Clasificación

La Fórmula 1 regresa con la Pole de Rosberg en el invierno de Spa

Víctor Serrano
23/08/2014 15:18

La Fórmula 1 regresa de vacaciones y lo hace de forma radical. Los pilotos estaban disfrutando hace unos días del buen tiempo en lugares paradisíacos y alguien les ha echado un cubo de agua helada por encima, ahora que está tan de moda el Ice Bucket Challenge. Y es que han llegado a Spa y se han encontrado con el invierno de bruces. Frío de ocho grados, viento racheado y lluvia, mucha lluvia antes de que comenzara la sesión clasificatoria.

Con una pista totalmente empapada se vivió una calificación en la que los pilotos tenían que conducir con manos de seda para evitar sustos y los espectadores ver sus pantallas sin quitar ojo para no perdérselos. Así, en las condiciones más delicadas emergió el Mercedes que más cabeza fría y rendimiento más constante está mostrando durante toda la temporada: el de Nico Rosberg. Séptima pole del año que el alemán arrebata a Hamilton y de las que duelen.

Le dolerá mucho a Lewis porque le ha batido con todas las de la ley y más de dos décimas en las condiciones en las que él siempre acostumbraba a destacar por su talento. El británico se ha quejado de problemas en los frenos, tiene una losa encima que no es capaz de quitarse. Eso sí, el mosqueo se le pasará rápido, en cuanto vea que mañana no hay nadie entre él y su compañero cuando se apague el semáforo. La  lucha puede ser encarnizada.

Por detrás de ellos y gracias a un suspiro de 69 milésimas partirá Sebastian Vettel. Esa ínfima diferencia es la que permitirá salir al alemán tercero y la que le ha impedido ese privilegio a Alonso. El tetracampeón de Red Bull se ha sacudido un poco la mala suerte que tiene este año, y que le siguió persiguiendo ayer con los problemas que tuvo en su RB10, a pesar de que estuvo a punto de quedarse fuera de la Q3 de no ser por un último sector demoledor.

Finalmente acabó siendo el más rápido del resto, incluido Ricciardo, al que supera un sábado por segunda vez consecutiva. Fernando, por tanto, se ha tenido que conformar con la cuarta plaza. Algo corta si tenemos en cuenta el escaso margen que le ha sacado Vettel y lo bien que se le dio el viernes, pero bastante buena porque de no haber llovido lo más probable hubiera sido que los Williams le hubieran empujado más atrás en la parrilla.

Así que el asturiano puede estar satisfecho de su posición en la salida y de haberle sacado un segundo al otro Ferrari, el de un Räikkönen que partirá octavo, algo que por habitual no deja de ser meritorio para uno y sonrojante para otro. Las cinco primeras filas las completan los Williams y los McLaren. Los colocamos en orden: Bottas por detrás de Ricciardo en la sexta plaza, Magnussen por delante de Kimi y Massa y Button cerrando el top ten.

De la Q2 no pasaron los Toro Rosso, algo poco habitual esta temporada y que llevamos sin ver en las seis últimas calificaciones, desde el GP de España. A lo que si empezamos a acostumbrarnos es a ver a un humilde Marussia pululando por lugares en el que no se le espera. Y eso es mérito exclusivo de Jules Bianchi, que ha pasado el corte de la Q1 en tres de los últimos cuatro sábados. Continúa pidiendo a gritos un monoplaza a su altura. Le llegará.

Para que el joven francés logre este tipo de sorpresas tiene que haber otras por debajo suya, y la de este gran premio la ha protagonizado Hülkenberg, que ha sido eliminado a la primera de cambio. También por detrás tenemos a un Gutiérrez averiado y a un Ericsson cabizbajo por perder su particular batalla con el debutante André Lotterer. No es para menos. Pero lo importante se jugará arriba. Mañana no anuncian lluvia, pero en Spa se avecina tormenta…