La anchura de los coches es un problema para adelantar, según Verstappen
Max Verstappen cree que no sólo la aerodinámica es un factor que dificulta los adelantamientos, sino que también influye la anchura de los coches actuales, lo que quita espacio para adelantar y en cierta forma favorece los toques. El piloto de Red Bull lamenta que este problema no esté corregido en los coches de 2022.
"Simplemente, los coches actuales son demasiado anchos. Esto implica que resulta muy difícil encontrar una trayectoria diferente cuando estás detrás de otro coche. Vamos a tener coches completamente nuevos el próximo año, pero continuarán siendo igual de anchos", ha declarado el piloto de Red Bull.
Para el de Países Bajos, aspirante al título de este año, los mejores coches "eran los de 2004 a 2008, en particular los de 2006 y 2007. Eran mucho más pequeños, más estrechos y más ligeros que los actuales. Aquello ayudaba a que hubiera más acción en la pista".
Liberty Media y la FIA, con el apoyo de los equipos, buscan que haya más acción en pista, más adelantamientos, recurriendo incluso a subterfugios como el DRS, pero sin llegar a encontrar un factor que mejore las acciones en pista. Es un esfuerzo que el 'layout' de las pistas, la aerodinámica, la anchura de los coches… y las sanciones de los comisarios se encargan de neutralizar.
"Creo que el deporte busca aún la solución idónea. Me gustaría que se encontrara para 2022. Haber permitido que los coches fuera más anchos ha mejorado las prestaciones, pero nos las carreras", ha recordado Verstappen.
"Es cierto que en cuanto a sensaciones de conducción pura tenemos mucha más adherencia pero, ¿es importante esto para los aficionados? Si pensáramos en hacer coches que pudieran seguir al de delante, sería más sencillo adelantar y no necesitaríamos artificios para hacerlo", señaló Verstappen, para quien el DRS –como para muchos aficionados– es un elemento que se usa para intentar aumentar de forma artificial las posibilidades de adelantamiento.
