Era el objetivo marcado por Red Bull este año

Horner lamenta que no hayan sido capaces de mejorar como Ferrari

Adrián Rodicio
18/08/2015 17:32

Es duro pasar de ser el equipo protagonista a verse relegado a una presencia testimonial a la vez que se cede el papel principal a otros. Esta situación es la que ha experimentado Red Bull en los últimos años. Tras aterrizar en la Fórmula 1, el equipo austriaco comenzó a crecer hasta convertirse en la estrella más brillante del firmamento, pero los cambios en las reglas han modificado el orden jerárquico, por lo que los de Milton Keynes deben luchar ahora por recuperar su posición.

 

Precisamente de este escenario ha hablado el jefe del equipo, Christian Horner, en una entrevista concedida a F1i, en la que ha analizado la actualidad del Red Bull y el futuro cambio en la normativa que se espera para 2017, una modificación que nace de la esperanza de que la categoría recupere su antiguo esplendor para enamorar de nuevo a aficionados de todo el mundo.

El objetivo era dar un paso como el de Ferrari; no ha sucedido y de ahí las frustraciones

Así, Horner ha explicado que, tras las tres victorias logradas en 2014, su objetivo este año era "dar un paso" similar al realizado por Ferrari, un avance que debería haberse realizado, en concreto, en la unidad de potencia: "Inevitablemente, eso no sucedió, y de que aquí han nacido muchas frustraciones. Luego, nos hemos visto a nosotros mismos en la parte trasera en términos de fiabilidad, sanciones y demás. Eso, obviamente, ha sido muy difícil de tratar, pero siento que, respecto al chasis, hemos hecho muy buenos progresos".

El británico ha sido capaz de encontrar, pues, razones para mantenerse optimista. Una de ellas es el comportamiento de sus dos pilotos, los cuales están demostrando como debe ser la relación entre dos compañeros: "Es muy bueno ver cómo están trabajando con los datos y cómo se están empujando mutuamente, pero no hay animosidad entre los dos en absoluto. Mónaco fue el mayor ejemplo de trabajo en equipo en su mejor momento y de respeto entre los conductores".

En este momento tenemos talentos muy interesantes en la piscina de Red Bull

En aquel Gran Premio, Daniil Kvyat dejó pasar a Daniel Ricciardo para que el australiano luchara por el podio pero, tras no conseguirlo, éste dejó al ruso recuperar la posición. Una buena muestra de fair play. Sin embargo, estos dos pilotos no son los únicos que están realizando un buen trabajo, ya que los dos debutantes de Toro Rosso, Max Verstappen y Carlos Sainz, están pisando fuerte.

Sobre ellos también ha opinado Christian, quien se ha mostrado encantado del talento presente en la escuela de Red Bull: "Es genial tener ese problema, ¿no? Creo que en este momento tenemos talentos muy interesantes dentro de la piscina de Red Bull y que todos ellos están compitiendo por posiciones, lo que es -desde el punto de vista del director del equipo- una situación fantástica en la que estar".

 

HACIA UN FUTURO PROMETEDOR

Red Bull, y por ende Horner, tiene muy presente el cambio de normativa que se realizará en 2017, un cambio con el que esperan recuperar su privilegiada posición.  Sin embargo, el británico insiste en que lo importante es lograr que los coches vuelvan a ser "dramáticos, espectaculares y difíciles de conducir": "Tenemos que devolver la espectacularidad a la Fórmula 1 y creo que hay una gran oportunidad para hacerlo en 2017".

La F1 tiene que ser la competición de coches más emocionante del mundo

Sin embargo, todo cambio de reglamento impone gastos a los equipos, algo que puede afectar a los más débiles. Sobre ello, opina que "lo importante" es cambiar "por las razones correctas": "La F1 necesita posicionarse como la competición de coches más emocionante del mundo. Hacer los monoplazas unos cinco o seis segundos más rápidos por vuelta, más agresivos, más difícil de manejar y más espectaculares, asegurará el tener carreras fuertes, con luchas cuerpo a cuerpo y con equipos competitivos".

Por último, Horner ha defendido la figura de los aficionados y ha aseverado que, sin ellos, la categoría no existiría, por lo que el nuevo cambio de reglamento ha de responder a las necesidades y peticiones de los fans: "Al final del día, la F1 no existe sin los aficionados y si no se ven atraídos por lo que ven, desconectan. Tenemos que asegurarnos de que la F1 engancha con la base de fans actual y una base de aficionados más amplia".