GP de Hungría F1 2020

Allison lamenta que Ferrari adopte una gestión interna cortoplacista

18/07/2020 10:05

James Allison ve una mentalidad cortoplacista en la gestión del equipo Ferrari, mentalidad que en su opinión no es siempre útil en un deporte como la Fórmula 1 donde a menudo es necesario esperar varias temporadas para observar los resultados de determinadas decisiones estratégicas.

Allison sabe bien de qué habla, pues él mismo ha trabajado en la Scuderia en el pasado en dos periodos distintos. Ejerció de director técnico entre julio de 2013 y julio de 2016, cuando por motivos personales decidió regresar al Reino Unido para estar más cerca de su familia. A principios de 2017 se unió a Mercedes-AMG.

El sustituto de James en Ferrari fue Mattia Binotto, que hasta aquel entonces había estado al cargo de las unidades de potencia. El mismo Binotto que a principios de 2019 asumiría la jefatura del equipo tras la salida de Maurizio Arrivabene, que dejó la formación después de una temporada marcada por las imprecisiones.

Cuatro años después de dejar Italia, James Allison se ha sincerado sobre cómo es trabajar para la Scuderia. Admite que es un honor formar parte de Il Cavallino Rampante, pero señala que la pasión del equipo a menudo entra en contradicción con las necesidades de la categoría reina, que demasiado a menudo pide paciencia.

"Trabajar para Ferrari es, en muchos sentidos, una alegría incomparable. El país apoya tanto al equipo y la marca es tan fuerte, su pasado es tan importante, que de verdad sientes que formas parte de algo importante", ha explicado el director técnico de Mercedes en Hungría, en declaraciones al Daily Mail.

"Pero es probable que eso también sea una carga, porque toda esa alegría que la nación siente por los éxitos de Ferrari también implica una presión muy grande cuando las cosas van mal. Y esa presión se aplica desde fuera, desde los medios de comunicación, de un modo mucho más intenso que en cualquier otro equipo".

"Eso se aplica internamente por parte de todas las personas que sienten el deber de estar a la altura de los grandes éxitos del pasado. Se expresa con un estilo de liderazgo vertical que en Ferrari seguramente es más exagerado que en los otros equipos. Eso suele derivar en que el equipo tome decisiones a corto plazo que pueden llevarlo por el mal camino, en vez de sentar unas bases que pueda trasladar de temporada en temporada".

Las declaraciones de James Allison ocurren en un momento en el que Ferrari está en el foco de las críticas por el pobre rendimiento de su SF1000, que esta temporada ha perdido comba hasta caer en la zona media de la parrilla. Charles Leclerc salvó un podio en el GP de Austria, pero en Estiria los dos coches abandonaron en un accidente en la primera vuelta.