BMW Serie 2 Active Tourer 2022: especie en extinción

El BMW Serie 2 Active Tourer 2022 sustituye al modelo que la marca alemana vende desde 2018, que a su vez fue el restyling del original, nacido en 2014. Se trata de la segunda generación del monovolumen.

Los principales rivales del Serie 2 Active Tourer dentro de los monovolúmenes compactos son el Mercedes-Benz Clase B y el Volkswagen Touran.

BMW SERIE 2 ACTIVE TOURER 2022: EXTERIOR

La nueva versión del monovolumen alemán mide 4,39 metros de largo, 1,82 metros de ancho y 1,58 metros de alto. La batalla es de 2,67 metros.

El aspecto del BMW Serie 2 Active Tourer varía en su frontal gracias, principalmente, a la presencia de una parrilla de mayores dimensiones y a unos faros más delgados. Estos son full led. También se han rediseñado el capó y los paragolpes.

La parrilla tiene la particularidad de ser activa, de tal forma que se abre y cierra en función de las necesidades de refrigeración del motor. Cuando éstas son menores y se cierra mejora la aerodinámica, lo que tiene una pequeña pero positiva incidencia en el consumo y las emisiones.

En la parte trasera también hay cambios de diseño. De nuevo varían los paragolpes y unas ópticas que son de led. Las salidas de escape permanecen ocultas a la vista.

Las manetas que permiten abrir las puertas están enrasadas, una solución que mostró por primera vez en la historia de BMW el Serie 4 Gran Coupé 2022.

En el lateral aparecen unas llantas de 17 pulgadas de serie, si bien pueden ser opcionalmente de 18 o 19.

Los acabados Luxury y M Sport varían ligeramente la imagen del monovolumen hacia un prisma más elegante o deportivo.

La carrocería se puede pintar en 11 colores diferentes.

BMW SERIE 2 ACTIVE TOURER 2022: INTERIOR

El interior del BMW Serie 2 Active Tourer puede incluir dos tipos de asientos, los convencionales y otros que ofrecen mejor agarre lateral.

En todo caso la capacidad es de cinco ocupantes. Se gana espacio respecto al modelo saliente en las dos filas de asientos. No obstante, la presencia de tres adultos en la fila trasera es algo justa. Es un vehículo ideal para cuatro adultos.

La visibilidad es bastante buena desde el puesto del conductor. Tan sólo el pilar A nos ha parecido algo intrusivo cuando se trata de afrontar virajes hacia la izquierda, al menos en la posición de conducción de nuestro probador Jorge Morillo –1,74 de estatura–.

Hay dos pantallas digitales que parecen ser una. Se trata del sistema denominado BMW Curved Display, una solución estrenada por el BMW iX. La de la instrumentación tiene un tamaño de 10,25 pulgadas, mientras que la del sistema multimedia es de 10,7. El sistema operativo es el nuevo BMW ID8.

El sistema multimedia permite control por voz, navegación basada en la nube y la disposición de datos en la pantalla central con realidad aumentada. Existen actualizaciones y mejoras inalámbricas.

Este nuevo sistema engloba prácticamente todas las funciones que antiguamente se controlaban con mandos físicos. Esto supone un cambio considerable respecto a los modelos más recientes de BMW. A pesar de ello, acostumbrarse al manejo de todo no resulta complicado. Se trata de una tecnología muy intuitiva.

Se puede incluir head-up display.

Cambia el diseño de la palanca de cambios, que deja de ser tal para ser un pequeño joystick. Justo a su lado, en la consola central, está ahora el botón de arranque.

La carga inalámbrica se encuentra debajo de las salidas centrales de aire acondicionado del salpicadero. Lo novedoso reside en que es prácticamente vertical. Para evitar que el móvil se caiga tiene un tope que se adapta a cada terminal.

Respecto al aislamiento del habitáculo nos ha parecido más que adecuado con cualquiera de las motorizaciones que hemos probado.

El maletero varía entre 415 y 470 litros. El menor de los datos corresponde a la versión 'mild-hybrid'. La banqueta trasera se puede desplazar 13 centímetros. Los respaldos se pueden colocar de forma vertical. Aún queda por descubrir el maletero de los híbridos enchufables.

Si se abaten los asientos traseros, algo que puede hacerse en proporción 40/20/40, se llega a 1.455 litros.

BMW SERIE 2 ACTIVE TOURER 2022: EQUIPAMIENTO

El BMW Serie 2 Active Tourer incluye de serie programador de velocidad activo con función de frenado, cámara trasera con asistente de aparcamiento y frenada de emergencia en ciudad con reconocimiento de peatones, ciclistas y tráfico en sentido contrario cuando se va a girar.

Opcionalmente se pueden añadir elementos como el asistente de cambio involuntario de carril con función de guiado, programador de velocidad activo con parada y arranque de forma automática, cámara de visión panorámica, head-up display, BMW Drive Recorder o Remote Theft Recorder. Estos dos últimos elementos son grabaciones de imágenes exteriores e interiores, las segundas pensadas especialmente para casos de robo.

Son también opcionales los faros matriciales. De hecho, este elemento es uno de los que se puede contratar a distancia una vez adquirido el coche. Esta solución cada vez se extiende entre más fabricantes, que de esta forma construyen los coches con el mismo equipamiento para que después sea el cliente el que determine qué usar y qué no.

El Serie 2 Active Tourer se vende con un acabado de serie, uno denominado Luxury y otro llamado M Sport. El segundo y el tercero orientan la estética del coche más hacia lo lujoso o lo deportivo.

Además existen dos paquetes llamados Premium Package e Innovation Package.

Es opcional el equipo de audio Harman Kardon.

BMW SERIE 2 ACTIVE TOURER 2022: MECÁNICA

BMW propone tres motores inicialmente para el Serie 2 Active Tourer, dos de gasolina, el más potente 'mild-hybrid', y uno Diesel.

El primer de gasolina es un 1.5 litros de tres cilindros con 136 caballos. Corresponde con la versión 218i y permite una aceleración de 0 a 100 kilómetros/hora en 9 segundos. El consumo medio oficial es de 6,2 litros a los 100 kilómetros.

El segundo de ellos es el de la versión 220i, tiene la misma cilindrada y aporta 170 caballos con 19 eléctricos. La aceleración de 0 a 100 kilómetros/hora se logra en 8,1 segundos. El gasto medio homologado es de 5,9 litros a los 100 kilómetros.

El propulsor Diesel es un 2.0 litros de cuatro cilindros con 150 caballos para la versión 218d. En este caso la aceleración de 0 a 100 kilómetros/hora se consigue en 8,8 segundos. Su consumo es de 4,8 litros a los 100 kilómetros.

Todas estas versiones son de tracción delantera. El cambio automático de siete velocidades viene siempre de serie. En esta ocasión es de doble embrague.

Más adelante, en julio, llegarán dos híbridos enchufables. Serán el 225e xDrive con 245 caballos y el 230e xDrive con 326 caballos. La batería es en ambos casos de 14,9 kilovatios hora y la autonomía llega hasta 90 kilómetros. Esto supone una mejora de 35 kilómetros respecto a la generación precedente.

El 225e xDrive tiene un motor térmico de 136 caballos y uno eléctrico de 109, mientras que el 230e xDrive eleva estas cifras a 150 y 176 caballos respectivamente. Las variaciones se deben principalmente a cambios en la gestión electrónica. La base de ambos motores es la misma, de ahí que BMW haya podido homologar para ambas versiones un consumo de entre 1,1 y 1,4 litros a los 100 kilómetros.

La potencia máxima de carga que admite la batería de estas versiones es de 7,4 kilovatios. En tal caso se necesitan algo menos de dos horas y media para recuperar el 100% de su capacidad.

Ambas variantes enchufables son de tracción total, ya que el motor térmico actúa sobre el tren delantero y el eléctrico sobre el trasero.

El híbrido enchufable más potente es capaz de acelerar de 0 a 100 kilómetros/hora en 5,5 segundos, mientras que el básico emplea 7 segundos.

BMW ofrece la opción de contar con el chasis estándar o con una suspensión adaptativa M con amortiguadores controlados electrónicamente y muelles específicos. De elegir esto último, la carrocería se acerca 15 milímetros al suelo.

También se puede elegir una dirección deportiva.

La selección de modos de conducción se simplifica respecto a modelos anteriores de la marca. Hay uno personalizado que permite al conductor controlar determinados parámetros, uno en el que prima la eficiencia y un tercero que aporta todo el carácter deportivo del vehículo.

Las versiones de combustión se sitúan entre 1.545 y 1.620 kilos.

BMW SERIE 2 ACTIVE TOURER 2022: IMPRESIONES DE CONDUCCIÓN

La nueva generación del BMW Serie 2 Active Tourer mantiene uno de los grandes puntos fuertes de la precedente, que es su dinámica de conducción. Su suspensión es firme pero a la vez confortable, y desde luego es una de las grandes responsables de que, a pesar de ser un monovolumen, se sienta con un compacto de su tamaño. Además la dirección mantiene el ADN de la marca sin dudar. Respuesta directa y precisa, sin dejar de comentar que las unidades que hemos probado contaban con el acabado deportivo y, por tanto, un volante cuyo grueso aro ayudaba a transmitir unas sensaciones más dinámicas si cabe.

Todo lo descrito vale tanto para la versión de gasolina 'mild-hybrid' de 170 caballos como para la más potente, 326 caballos, de las híbridas enchufables, que son las dos que hemos probado durante la presentación internacional del modelo. La segunda, por cierto, aún sobre uno de los prototipos que la marca utiliza para afinar su puesta a punto.

La variante de gasolina destaca por lo versátil de su funcionamiento. Es capaz de aportar toda la suavidad que demanda una situación urbana y contundencia en el caso de requerir una aceleración fuerte. Además, la presencia de la parte eléctrica ayuda a aportar un extra de caballos que se agradece en determinadas situaciones y a limitar el consumo. Durante los aproximadamente 80 kilómetros que duró nuestra prueba el gasto medio registrado fue de 8,2 litros a los 100 kilómetros, cifra que es sencilla de rebajar puesto que la misma no fue para nada favorable de cara a lograr buenos consumos. Lo que más abundó en el recorrido fue carretera secundaria de montaña.

Conviene destacar también la presencia del cambio automático de doble embrague con siete velocidades. Funciona bien, pero no alcanza las cotas de confort que puede ofrecer el convertidor de par de ocho marchas que equipan otros modelos de BMW. Por qué se ha decantado la marca alemana por el doble embrague es algo que desconocemos. Por último, apuntar que el tacto del freno no es todo lo natural que debería durante la primera parte del recorrido del pedal a causa de la electrificación del motor, algo que, no obstante, es un mal endémico de todos los vehículos dotados de esta tecnología.

Respecto al híbrido enchufable lo mejor que se puede decir es que su comportamiento no difiere prácticamente en nada de la versión de gasolina. La misma sensación de agilidad se percibe claramente a pesar de su seguro extra de peso –el 220i pesa 1.595 kilos, mientras que del enchufable aún no hay dato–, a lo que hay que unir un muy agradable desempeño urbano de la mano de su autonomía eléctrica. No obstante, si algo sorprende de esta versión del Serie 2 Active Tourer es la aceleración que ofrece cuando se utilliza toda su potencia. Para ello hay que activar un modo que se llama 'Boost' y enseguida se siente un empuje más propio de un deportivo que, además, va acompañado de un sonido más propio de una nave espacial.

Las condiciones en las que realizamos la prueba del híbrido enchufable, tras una 'liebre' y mientras testeábamos todas las peculiaridades del coche, hacen que haya que coger con pinzas el dato del consumo. Tras unos 60 kilómetros recorridos éste era de 4,4 litros a los 100 kilómetros. Esta cifra, en el caso de utilizar como se debe la parte eléctrica del coche y no abusar de su poderío, es incluso desproporcionada para lo que se puede conseguir.

Dicho todo esto, nos quedamos con las ganas de probar la versión Diesel del modelo, que sobre el papel parece la más equilibrada en cuanto a prestaciones y consumo de carburante. Obviamente se queda a uno o dos pasos del poderío del enchufable o del siempre especial sentimiento que genera una mecánica de gasolina, pero conviene no olvidar que el Serie 2 Active Tourer es, ante todo, un vehículo en el que prima la practicidad.

BMW SERIE 2 ACTIVE TOURER 2022: PRECIO

El precio del BMW Serie 2 Active Tourer 2022 parte en España de 36.900 euros para el más básico de los motores de gasolina. En de 170 caballos se va hasta 39.900 euros, mientras que el Diesel se queda entre ambos con un coste inicial de 37.700 euros.

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