Desarrollan unas baterías que aseguran 1.000 kilómetros de autonomía

Aunque poco a poco es mayor, la autonomía de los coches eléctricos es todavía un hándicap para su compra. Por suerte esto puede pasar a mejor vida gracias a las nuevas baterías bipolares que se desarrollan gracias al proyecto EMBATT-goes-FAB, en el que participan cuatro instituciones y empresas alemanas como son Daimler, Thyssenkrupp System Engineering, IAV y el Instituto Fraunhofer.

Será durante los dos próximos años cuando todos ellos desarrollen las baterías bipolares, que tienen como principal ventaja una mayor capacidad de almacenamiento que sería la responsable del aumento de autonomía de los eléctricos, concretamente hasta unos 1.000 kilómetros. Se van a investigar técnicas de fabricación a gran escala y diversas opciones de integración una vez concluya la primera etapa del proyecto.

Estas baterías bipolares son de iones de litio, y constan de electrodos apilados y conectados en serie. La diferencia con las baterías convencionales la tenemos precisamente en estos electrodos, que son bipolares. Por su parte las celdas individuales de iones de litio no están empaquetadas por separado, sino que se envuelven en una carcasa común. El resultado es la eliminación de los componentes necesarios para sujetar cada paquete y los elementos de conexión, lo que deriva en un ahorro de costes y también de especio. Así se puede incluir más material activo, de tal forma que se puede almacenar más energía.

El proyecto, que se prevé que dure dos años, repartirá labores entre sus cuatro socios. El Instituto Frahunhofer será el que produzca los electrodos bipolares mejorados basados en óxidos de litio, níquel, manganeso, cobalto y grafito, que serán los de almacenamiento. Thyssenkrupp System Engineering será el que haga el escalado de la tecnología de ensamblaje, mientras que el sistema de monitoreo es para IAV. ¿Y el papel de Daimler? Será el de realizar simulaciones de seguridad para abordar los requisitos del vehículo en cuestión.