Cinco años de cárcel por planear un atentado contra el GP de Baréin

Fueron detenidos en una protesta cerca del circuito y se quejaron de que fueron torturados. La agencia de noticias no nombró a los cinco implicados, pero dijo que habían confesado. No obstante, la Sociedad de Jóvenes por los Derechos Humanos de Baréin (BYSHR por sus siglas en inglés) identificó a las dos mujeres como las activistas Nafisa al-Asfoor y Rayhana al-Musawi. "Las dos mujeres han dicho a sus familias que la policía las torturó y abusó de ellas durante los interrogatorios", dijo la BYSHR.

El reino sunita del Golfo Árabe tuvo problemas con los disturbios desde que en 2011 comenzó la protesta masiva a favor de la democracia, encabezada por la comunidad chiíta, que es mayoritaria en el país. Las autoridades acayaron las protestas, pero, desde entonces, los radicales chiítas llevaron a cabo actos de violencia de baja intensidad contra las fuerzas de seguridad. En los últimos meses aumentó el uso de bombas de fabricación casera.

El Gobierno vio el Gran Premio de Baréin como una forma de incrementar el perfil internacional del país y atraer a turistas y la inversión extranjera. Sin embargo, la oposición utiliza este evento para protestar y centrar la atención en sus demandas. En 2011, cuando los disturbios estallaron como parte de los levantamientos de la Primavera Árabe, la carrera tuvo que ser cancelada. Pero el evento se volvió a celebrar cada año desde entonces.

Por parte del Gobierno no se hicieron comentarios sobre las acusaciones, pero en el pasado las autoridades han dicho que la tortura no es una política del Gobierno. De hecho, en las prisiones se instalaron cámaras para grabar los interrogatorios. Baréin también dijo que su poder judicial es independiente.