Novedades técnicas del Gran Premio de Alemania F1 2016

Se están estudiando distintas alternativas, ahora ha surgido la opción de trabajar en un elemento activo que esté oculto y salga en caso de accidente. Algo así como un airbag pero rígido. El problema es que se pierde la protección ante objetos que puedan venir volando, a no ser que se cuente con una detección de los mismos, algo francamente complicado.

Pero bueno, vamos con lo que hay, que lamentablemente no es mucho. En primer lugar McLaren trae pequeñas actualizaciones, como puede ser el llamado bat wing. No, no es el avión de Batman, se trata de un aletín que se coloca sobre el tea tray. Vaya terminologías gastan en la Fórmula 1.

Tenemos a la derecha el de McLaren cubierto con parafina de color y marcado en azul, en una foto con la calidad digamos… Justita. Por eso también os traigo a la izquierda el del Red Bull, marcado en rosa para que se aprecie mejor.

Toro Rosso trae una salida de aire super XXL king size, es verdaderamente enorme. Sabiendo cómo son sus recortados pontones, casi hay más sección de salida que de entrada. Detalles curiosos, la curvatura del plano superior del alerón trasero, así como la del tirante superior de la suspensión trasera.

Y como hay poca novedad más, os traigo imágenes curiosas. La primera de Mercedes, se puede apreciar el sensor de temperatura de las ruedas traseras colocado en el saliente del fondo plano. Esto no es novedad, pero a principio de año se habló mucho de la asociación de Mercedes con Qualcomm.

Si no tenéis un iPhone, es altamente probable que vuestro móvil lleve uno de sus procesadores. Precisamente esta asociación es importante para monitorizar en tiempo real las temperaturas y presiones de los neumáticos, de ahí la brillante gestión de los mismos por las flechas de plata, capaces de calentarlos antes que nadie pero aun así no sufrir de una degradación exagerada.

Última tecnología, sí, pero siguen con el apaño de la suspensión trasera. Otro detalle es el del filtro en la admisión de Mercedes. Al fin y al cabo, es un coche como los nuestros, solo que un poquito más caro.

El desarrollo o los materiales son solo dos de los motivos de este coste tan elevado, pero hay uno que lo eleva muchísimo, y es la precisión. Cada vez que añades una cifra después de la coma en una medida el precio se multiplica. Y podemos ver cómo estos neumáticos pesados por Ferrari pesan exactamente lo que tienen que pesar. Según esa báscula no se mueven ni 10 gramos de su especificación, pero estoy seguro de que la precisión es aún mayor. 

Pues con esto y mucho calor nos despedimos. Esperemos que a la vuelta de vacaciones veamos más novedades. Sí, las fábricas cierran, pero las cabezas de los ingenieros siguen en marcha.