Hamilton ganó porque no sabía que era imposible

Pero para Lewis no fue imposible. Luchó desde el primer minuto hasta el último. Se supo rehacer del palo tremendo que se llevó el sábado, cuando su coche se quedó tirado con un fallo hidráulico. Se levantó de esas cenizas, levantó el vuelo. Veías en su lenguaje corporal que iba a por todas.

Es cierto que la carrera le dio oportunidades. El error de Vettel, la lluvia… Pero el resto lo puso él. El carácter, el darle la vuelta a una situación tan sombría. Un stint larguísimo con unos neumáticos muy desgastados, con blistering. Lewis estuvo soberbio. Recortó la distancia con cabeza de carrera y le devolvió la moneda a Vettel, que venía de ganar en su casa dos semanas antes.

La comparación del comportamiento de Hamilton con el de Sebastian Vettel es realmente impresionante. Sin entrar en el error de Vettel, que es humano y puede equivocarse, aunque él es de los que menos errores comete, sí que me pareció sorprendente su actitud de pataleo después de tocar el muro. Esos golpes al volante nada más impactar… Yo creo que tendría que haber intentado sacar el coche. En ningún momento lo intentó. Estoy seguro de que Hamilton, de que Alonso se hubieran dejado el alma. Se hubieran bajado del coche para empujarlo, incluso. No entiendo por qué Vettel no lo hizo, pero la parte buena es que cuando volvió al paddock dijo que ya había pasado página, que no iba a perder el suelo y que la siguiente carrera es de aquí una semana.