Juncadella y el DTM: "La presión la tienen otros, yo vengo a disfrutar"
La temporada 2018 del Campeonato de Turismos Alemán no arranca hasta mayo, pero los pilotos tienen muchas ganas ya de medirse los unos con los otros. Este año cuenta con un incentivo especial, el regreso de Daniel Juncadella a la categoría y con él, otra vez representación española en la categoría. Tras un año sin correr en la disciplina, el piloto vuelve con más fuerza que nunca, para pasárselo bien junto a Mercedes.
Desde 2013 Dani Juncadella ha sido parte de la gran familia del DTM. El catalán participó en la categoría como titular en cuatro ocasiones y su objetivo es claro: mejorar los resultados de aquellos años y disfrutar en el último año en el que Mercedes estará en esta competición.
"En mis primeros cuatro años en el DTM no logré los resultados que imaginaba que conseguiría, pero no siento presión ninguna. No tengo que volver a demostrar nada. Los resultados sólo pueden mejorar y es una gran oportunidad terminar mi tiempo en el DTM con Mercedes", ha comentado Juncadella en declaraciones recopiladas por Mercedes en un comunicado.
"Hay tantos pilotos fuertes y excampeones en la parrilla esta temporada que la presión la tienen los demás. Yo sólo quiero divertirme y luego los resultados vendrán por sí solos", ha continuado.
Juncadella vuelve, después de un año en el que ni mucho menos ha estado parado, con energías renovadas y con ganas de medirse contra sus rivales. "Para mí, es muy especial formar parte de un año histórico. Tras un año de ausencia, estoy listo. 2016 fue una temporada difícil para mí, no estaba contento con la situación, por eso necesitaba el cambio que me dio estar un año fuera del DTM", ha añadido.
"Ahora vengo con las pilas recargadas y tengo ganas de competir en una parrilla tan sólida. Es genial que tengamos a un conjunto de pilotos tan fuertes en Mercedes y que tenga la oportunidad de medir mi rendimiento contra el de mis compañeros de equipo", ha compartido.
2017 fue un año importante para Juncadella, ya que pese a estar alejado del DTM, tuvo tiempo para reflexionar y pensar si quería seguir compitiendo. El barcelonés reconoce que entonces perdió la motivación, pero poco a poco logró redescubrir la diversión de las carreras. De esta manera, fueron unos meses de gran utilidad profesional para él.
"Sí, –pensó en dejar de competir–, no disfrutaba ya. No estaba motivado, ni en condiciones. Necesitaba ese año fuera para volver a mis raíces y disfrutar de la competición de nuevo. Se trata de luchar contra los mejores pilotos del mundo. Pasaron seis meses hasta que competir me volvió a divertir", ha expresado.
"Los resultados también empezaron a mejorar y me di cuenta de que así tenía que ser, de que tienes que disfrutar de las carreras, pero no me arrepiento y ahora disfruto del momento", ha señalado para finalizar.
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