Intel quiere desarrollar su propio coche autónomo

La mayoría de los ordenadores del mundo tienen en su interior un procesador de la marca Intel, que desde su creación en 1968 ha liderado las ventas y la fabricación de estos componentes vitales para los ordenadores. En el caso de los coches autónomos, precisan de un ‘cerebro’ que dirija sus movimientos y ayude a sus sensores y cámaras a moverse de forma independiente, lo que ha llevado al gigante tecnológico a centrar sus esfuerzo en este ámbito. No quiere decir que Intel vaya a fabricar coches, su intención es –como reza su slogan, Intel inside– estar dentro de ellos con el desarrollo de componentes fundamentales. 

Brian Krzanich, consejero delegado de Intel desde 2013, ha anunciado en el Salón del Automóvil de Los Ángeles su plan de acción para desarrollar su propia tecnología de conducción autónoma e invertirá 230 millones de euros para conseguirlo.

La compañía de Santa Clara -California- pretende invertir en varias startups que ya están trabajando en tecnologías relacionadas con los coches autónomos. En el pasado mes de abril, ya adquirió la empresa italiana de seguridad en procesadores Logitech y en mayo un desarrollador de algoritmos llamado Itseez, lo que evindecía la dimensión el proyecto. En este sentido, el pasado verano Intel se asoció con BMW y MobilEye para crear el coche completamente autónomo en 2021.

Concept del vehículo autónomo desarrollado por Intel y BMW

Además, otra de las razones por la que Intel invertirá en esta tecnología es que su máximo competidor -Nvidia- ya trabaja desde hace tiempo en la conducción autónoma. Por ejemplo, el sistema Drive PX de Nvidia es utilizado por marcas importantes como Tesla y en su Autopilot. Por otro lado, también trabajan con la marca china Baidu para la creación de otra plataforma autónoma.