Dixon sólo necesita ser noveno en St. Petersburg para ganar el título
Scott Dixon y Josef Newgarden se jugarán el título de la IndyCar este domingo en St. Petersburg. Que dos pilotos se jueguen la corona en la última carrera es ya casi un hábito en la categoría; en los últimos 15 años, el ganador de la Astro Challenge Cup se ha decidido en ella.
Serán 100 vueltas a este trazado, poco menos de 300 kilómetros, los que decidirán quién será el campeón 2020. El neozelandés fue campeón en 2018 –antes lo había sido en 2008, 2013 y 2015–; su rival, en 2017 y 2019. La separación entre ambos es importante, 32 puntos, así que las opciones de Newgarden pasan prácticamente por ganar y un serio revés de su rival, ya que a Dixon le basta con acabar 9º –en caso de victoria de su rival– para ser campeón
Newgarden viene de una racha espectacular. En las cinco últimas carreras ha reducido de 117 a 32 su desventaja con respecto al neozelandés. Y cabe recordar que, en las dos últimas carreras, en el circuito rutero de Indianápolis, Dixon tuvo como mejor resultado un octavo puesto. Pero el estadounidense tiene un problema: sólo arrancará 8º, aunque Dixon no lo hace mejor, ya que arrancará 11º.
Quizás muchos prefieran fijarse en la carrera de St. Petersburg del pasado año, aunque entonces fue la carrera de apertura, Newgarden ganó, pero Dixon fue segundo a menos de tres segundos. Y también se fijan en que este año en sólo tres de las 13 carreras disputadas el neozelandés ha acabado fuera de los diez primeros.
Para muchos, la clave de este circuito estará en la primera curva. La ancha recta de meta, con piso de hormigón –no en vano es una pista de aeropuerto– acaba con una cerrada curva y entrada en asfalto. Todo un desafío que ha visto siempre bastantes incidentes, no en vano es el único punto claro de adelantamiento.
Rinus VeeKay es ya virtual ganador de la 'rookie cup'; le basta con tomar la salida para hacerse con la victoria. Oliver Askew, que vuelve, se despide de momento de la categoría ya que Arrows McLaren SP no le renovará el contrato. Y está el debut del neozelandés Scott McLaughlin, procedente de los Supercars australianos, que ya ha firmado por Penske para 2021. En el paddock se ha hablado asimismo de los muchos cambios de equipo –el paso de Ericsson a McLaren, por ejemplo– para el próximo año y la intención de la estructura de Andretti de alinear seis coches.
Y por supuesto, hay muchos pilotos que quieren rematar la temporada con un buen resultado que les reafirma cara a 2021. Entre estos está, obviamente Alex Palou, que brilló en loss Libres –tercero– pero no remató en clasificación –decimosexto–.
