Crea de forma artesanal su propia réplica del Ferrari LaFerrari
Un conductor de mMalasia se ha puesto manos a la obra y ha creado una réplica del coche de sus sueños. Un Ferrari LaFerrari artesanal al que todavía le queda mucho trabajo por delante y que, lógicamente, no tendrá las prestaciones del supercoche italiano.
Muchas personas sueñan con tener un hypercar como el Ferrari LaFerrari para poder disfrutarlo siempre que quieran. Pero coches de esa categoría son astronómicamente caros, tanto de adquisición como de mantenimiento, y no están al alcance de todos. Sin embargo, hay quien prefiere tomar caminos alternativos y crea su propio hypercar, aunque los resultados no siempre son los esperados.
Así ha ocurrido con una réplica del mencionado LaFerrari en Malasia, realizada de forma artesanal y con chapa de acero. Las imágenes han sido publicadas en CarBuzz donde, además, destacan algunas cosas como la adopción de un par de linternas sujetas con lo que parece cinta de embalar al capó, para poder circular por las noches.
El frontal de esta curiosa creación presenta los rasgos claros del Ferrari LaFerrari. No tiene la sutileza del modelo italiano, obviamente, pero se reconoce al primer instante su fuente de inspiración. algo similar ocurre con la parte trasera, que cuenta con un par de faros circulares, cuatro salidas de escape, la rejilla de extracción de aire y un alerón superior que ha añadido su creador, pues el hypercar híbrido de Ferrari no cuenta con este tipo de elemento aerodinámico.
Visto de perfil, la inspiración no queda tan clara y todo es mucho más burdo y tosco. Las proporciones tampoco cuadran con el modelo italiano y ofrecen un aspecto poco favorable a su vista lateral, que se presenta totalmente descompensada. Además, faltan cristales, una buena mano de pintura y, al menos, el asiento del copiloto. No hay imagen del coche visto desde el lado derecho, pero da la impresión que también falta esa puerta.
No hay datos sobre qué coche se han empleado como base, pero no cabe duda de que falta completa la réplica. Quizá no sea el trabajo más fino que hayamos visto, pero su dueño ha preferido crear él mismo el coche de sus sueños a verlo sólo en dichos sueños.
