El Black Friday retrasa la entrada en vigor de Madrid Central una semana

El Black Friday es una jornada con importantísimos descuentos que genera un verdadero caos de gente en busca de la oferta perfecta en las tiendas americanas desde hace muchos años. Se celebra el último viernes de noviembre y su origen tiene varias teorías, un motivo que no ha importado en España para tomarlo por costumbre. Es precisamente el Black Friday el culpable de que la prohibición de circular por Madrid Central, la zona más céntrica de la capital, se aplace una semana. En lugar del día 23 de noviembre entrará en vigor el 30.

El Ayuntamiento de Madrid ha accedido a este cambio a raíz de las peticiones de la Confederación Empresarial de Madrid, que solicitó tal demora para evitar que las restricciones circulatorias afecten negativamente a los comerciantes. Según Rita Maestre, portavoz municipal, "es una modificación bastante leve que no afecta al conjunto del proyecto y a la salud de los ciudadanos. Nuestra voluntad es aplicar Madrid Central y proteger la salud de los madrileños".

El día 29 de octubre se celebra una junta extraordinaria por parte del equipo de gobierno para aprobar de forma definitiva el proyecto de Madrid Central. Una vez que esto suceda, todo aquel que acceda indebidamente a las zonas afectadas recibirán una multa de 90 euros. No obstante durante los dos primeros meses sólo se producirán avisos meramente informativos.

Una vez que Madrid Central esté en vigor, solamente podrán entrar en la zona los residentes empadronados en los barrios del distrito Centro, los que vivan en estos barrios aunque no estén empadronados siempre y cuando tengan un coche ECO o CERO, los invitados por residentes empadronados -cada uno tendrá 20 invitaciones por mes-, personas de movilidad reducida, cualquier coche etiquetado por la DGT que aparque en un parking público o privado y los taxis y VTC con etiqueta. Los vehículos de carsharing se rigen por la normativa general.