La DGT anuncia 1.200 fallecidos en carretera en 2017, 39 más que en 2016
Como cada año en los primeros días de cada enero, conocemos las cifras de la siniestralidad en las carreteras españolas del curso pasado. En esta ocasión, la DGT ha anunciado que en 2017 fallecieron 1.200 personas en vías interurbanas, un número mayor que en el ejercicio anterior.
La DGT ha publicado el número de fallecidos en carretera en 2017 y, por desgracia, el dato es el peor de los últimos cuatro años y un 3% superior a 2016. Las 1.200 víctimas –39 más que en 2016– se produjeron como consecuencia de 1.067 accidentes de tráfico en vías interurbanas. Estos datos contemplan tanto los fallecidos en el propio accidente como durante las 24 horas posteriores al siniestro.
Gregorio Serrano, director de la DGT, ha indicado que el aumento de vehículos y de desplazamientos –un 4,6% superior– son los reponsables de este aumento de 28 accidentes en relación al año pasado.
Se han incrementado también el número de ciclistas fallecidos y, en 2017, España cerró el año con 44 fallecidos, 11 más que en 2016, así como los motociclistas fallecidos en carretera, que han pasando de 214 en 2016 a 240 en 2017.
La cifra que sí ha descendido es el número de peatones fallecidos, 91 en 2017 frente a 120 el curso anterior. Además, en 2017 hubo 336 hospitalizados menos que en 2016.
A estos números –que son cifras provisionales– habrá que sumar los fallecidos en vías urbanas, un dato que la DGT todavía no ha publicado. No obstante, la tendencia de la última década apunta a que este dato superará los tres centenares.
LA SOLUCIÓN, EN LA TECNOLOGÍA
Estas cifras han hecho saltar las alarmas en la DGT, que instalará hasta 60 nuevos radares móviles de tramo en carreteras convencionales.
De ser identificado un infractor, la Guardia Civil detendrá el vehículo en ese momento para "evitar que el propietario del vehículo pueda alegar que no era él quien conducía en el momento de la infracción", según ha afirmado Serrano.
Además, para reducir la cifra de fallecidos, la DGT implementará drones que puedan sancionar las infracciones, como lo hacen los helicópteros de la DGT. En 2018 se realizará una inversión y los primeros aparatos empezarían a volar en 2019.
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