Alemania obligará a las gasolineras a poner puntos de carga para coches eléctricos

Olaf Scholz, Canciller alemán, fue el encargado de hacer el anuncio durante el Salón del Automóvil de Múnich. La normativa establecerá que el 80% de las gasolineras alemanas deberá ofrecer opciones de carga rápida con una potencia mínima de 150 kilovatios.

El objetivo del gobierno alemán es aumentar el número de cargadores públicos de los aproximadamente 90.000 que hay ahora a un millón en 2030. Cuando llegue ese año la previsión es que circulen por las carreteras teutonas unos 15 millones de vehículos alimentados por baterías. Se trata de un objetivo ciertamente ambicioso, ya que ahora ese número es de 1,2 millones.

Esta medida que tiene en mente Alemania no hace más que enfocar el futuro de su industria hacia el cumplimiento de la medida europea que prohibirá la venta de coches de gasolina y Diesel desde 2035, aunque cabe recordar que sí podrán circular hasta 2050 y, además, existe una puerta abierta para los e-fuels.

"La ampliación de la red de carga hará que la ansiedad por la autonomía sea cosa del pasado para los conductores de vehículos eléctricos", ha declarado Scholz. De llevarse a cabo la ley tal y como se ha avanzado, uno de los puntos clave de la misma es la potencia mínima que se exigirá a los cargadores. Sólo así los tiempos de recarga serán aceptables especialmente si las conexiones a la red se llevan a cabo durante un viaje de largo recorrido.