DeBruyn Ferox V8: ¡Spyker vive!... más o menos
Este coche es un roadster biplaza con mecánica V8 y diseñado por la misma persona que revivió a la firma holandesa Spyker a finales del siglo pasado. Se llama DeBruyn Ferox y está íntegramente fabricado de manera artesanal, hasta el último de sus detalles. Para los interesados, ya se aceptan pedidos a partir de un precio de 650.000 euros.
El fabricante Spyker ha sufrido unos últimos años convulsos cuando menos, ya no por el hecho de rozar la bancarrota, sino porque han sido más de uno los intentos por reflotarla sin éxito, el último de ellos en 2021. A comienzos de 2022 se anunció una nueva inversión por parte de capital ruso en la firma, pero poco más se ha sabido de ella, muy posiblemente afectada por el conflicto de Ucrania.
Maarten de Bruijn fue uno de los cofundadores del renacer de la marca a comienzos del Siglo XXI y diseñadores de sus coches, cuyo debut fue el C8 Spyder. Y decimos 'renacer', porque la firma Spyker remonta sus orígenes hasta 1880, cuando se dedicaban a fabricar diligencias y carros tirados por caballos hasta 1925.
El modelo que hoy nos toca es una creación de su propia marca independiente, sacada adelante con la ayuda de dos socios, pero se pueden apreciar claramente las líneas que han caracterizado siempre a sus vehículos.
Cada detalle, tanto interno como externo, ha sido llevado a cabo y revisado por el propio Bruijn, que ha querido primar por encima de todo el valor de la artesanía. El perfil, mires desde donde mires, recuerda siempre a los coches de Spyker, con un frontal bajo y afilado, un lateral de líneas curvas y orgánicas con filigranas que parecen hacer referencia a turbinas, como el acabado del inferior de las puertas o las llantas. La zaga se corta rápidamente y enfatiza la anchura del coche en esta zona. Las medidas son 4,2 metros de largo, 1,87 metros de ancho y apenas 1,05 metros de alto.
Lo realmente curioso del mismo es su manufactura en aluminio, que deja a la vista incluso el remachado entre los paneles del coche, algo que Bruijn ha decidido hacer a propósito. El peso final en la báscula es de apenas 1.050 kilos y las unidades de producción las factorizará el especialista carrocero Jansen.
Sus progenitores quieren que éste sea uno de los últimos deportivos auténticamente analógicos que puedan comprarse, por lo que han preferido prescindir en absoluto de cualquier tipo de pantalla en el salpicadero, todo son botones.
En este sentido también colabora la caja de cambios manual de seis relaciones, con las varillas actuadoras completamente a la vista de los dos ocupantes. Porque sí, este Ferox es un biplaza descapotable con motor central, de la vieja escuela.
Y ya que lo hemos mencionado, pasemos a hablar del mismo. La primera unidad ensamblada del Ferox, al igual que los Spyker de comienzos de siglo, utiliza un conjunto V8 de Audi con 350 caballos montado en posición central. No obstante, las unidades comercializadas harán uso de otro V8, en esta ocasión de origen General Motors, con 6.2 litros de cilindrada y 500 caballos.
Desde la firma también confirman que éste se pondrá a punto 'in house', por ejemplo, cambiando el volante de inercia por uno de diseño propio, aunque es el único detalle que ha dado.
Ya se encuentra a la venta a un precio que parte de los 650.000 euros sin aplicar impuestos. Por el momento, Bruijn ya ha dicho que tiene tres pedidos en firme, aunque no está claro cuándo podrán entregarse a sus propietarios.
