ARTÍCULOS SOYMOTOR.COM

La movilidad sostenible, ¿cómo cambia nuestra vida?

25/09/2018 18:24

La movilidad sostenible es algo de lo que se habla constantemente de un tiempo a esta parte, pero ¿de qué se trata exactamente? ¿En qué nos afecta en nuestro día a día? Nosotros casi no nos damos cuenta, pero nuestra vida es cada jornada un poquito diferente.

Movilidad sostenible. Dos palabras que escuchamos desde hace mucho tiempo pero que pocos saben definir correctamente. Se trata de un concepto que nace a raíz de los problemas medioambientales causados por el propio devenir de nuestra vida, especialmente a partir de la segunda mitad del siglo XX. Desde entonces, moverse con el coche particular ha hecho que el deterioro del medio ambiente deba atajarse con firmeza. Contaminación, consumo excesivo de energía, problemas de salud en la población... las consecuencias son múltiples, y a cada cual peor. 

¿Cómo afrontar todo esto? Hay que tratar de adecuar el ritmo de vida de la población a aquello lógico y necesario. Sí, es cierto que las restricciones que vivimos hoy en día en este sentido en las grandes ciudades no son plato de buen gusto, pero son inevitables. No obstante, lo más importante es que existen alternativas para poder adaptarse a los nuevos tiempos sin que suponga un drama para nuestro transporte. La llegada de los coches híbridos-eléctricos y enchufables es una de ellas, y no la única. También son de interés la aparición de empresas de vehículo compartido como Car2go o Emov, que tan bien funcionan en las principales urbes españolas y que suponen un importante ahorro de emisiones nocivas al día. Y todo ello por no hablar de un transporte público que sigue a nuestro alcance.

 

EL CARSHARING, UNA SOLUCIÓN CADA VEZ MÁS EXTENDIDA

Es cierto que no todos los ciudadanos tienen la capacidad adquisitiva como para afrontar la compra de un vehículo propio con motorización híbrida-eléctrica, pese a las generosas ofertas que hacen marcas como Toyota para ello. De esta forma, adaptarse a la solución del coche compartido o carsharing se hace vital. En este sentido la marca japonesa opera con Yuko en Italia, con una flota de 49 unidades de Yaris Hybrid y Prius en la ciudad de Venecia. Y ojo, porque este concepto del carsharing no solamente afecta al usuario común, sino que también las empresas pueden poner su granito de arena en este sentido. Por ejemplo, una compañía puede invertir para poner al servicio de sus empleados vehículos que no contaminen, lo que deviene en beneficio de todos. ¿Para qué? Para que estos empleados puedan acudir a reuniones puntuales, realizar acciones comerciales u otras obligaciones del día a día sin tener que recurrir al vehículo propio. Las marcas lo saben y actualmente existen programas de renting y leasing de coches Eco inimaginables hace apenas cinco años.

Estamos, por tanto, ante un cambio que ya empezó hace tiempo, y que no solamente afecta al usuario. Sí, éste tiene que variar su manera de entender el transporte y dar prioridad a los nuevos medios de movilidad privada, pero también se agradece la creciente infraestructura pública de las ciudades españolas. Nos queda camino por recorrer si tenemos en cuenta lo que se vive en países vecinos, pero concejalías de movilidad en toda España y un buen racimo de constructores automovilísticos trabajan para lograr infraestructuras adecuadas a los tiempos actuales, y los que vienen. Cada vez hay más híbridos-eléctricos y enchufables por nuestras calles que necesitan puntos de recarga en la vía pública. Quién haya visitado ciudades del norte de Europa sabrá exactamente a lo que nos referimos, aunque en centros comerciales, hoteles y edificios públicos empiezan a ser comunes los cargadores.

 

MUCHO POR HACER

Las medidas emprendidas en las diferentes ciudades para a asegurar la ansiada movilidad sostenible son positivas, pero aún quedan cosas por hacer. A la creciente reducción de los motores de combustión convendría una mejora del transporte público, que a su vez ha de ser lo más verde posible. La tecnología también puede jugar aquí un papel importante para hacer más atractivo su uso, con la mejora del sistema de compra de billetes o la posibilidad de planificar viajes con diferentes medios de transporte. Tampoco conviene olvidar el papel que puede jugar la bicicleta, aunque para ello habría que crear unas condiciones más seguras para el usuario, ya sea a través de carriles bici –Valencia ha dado pasos muy determinados en este sentido– o con privilegios y también obligaciones para circular junto a los vehículos a motor.

En definitiva, la movilidad depende de cada uno de nosotros, tanto de los usuarios, que nos tenemos que adaptar a los nuevos tiempos, como de las empresas, que deben abrir miras en sus inversiones. Todo esto sin olvidar a los mandatarios electos, que han de poner toda la carne en el asador para completar una transición que, si se hace con todos de la mano, será mucho más suave de lo que podría parecer.

 

FUTURO DE LA MOVILIDAD SOSTENIBLE

Vamos a repasar algunos datos que refuerzan la necesidad de una movilidad sostenible en el seno de nuestras ciudades. Por ejemplo, se sabe que a día de hoy un 50% de la población española vive en las grandes urbes, una cifra que aumentará hasta el 70% en 2050. Esto supondrá más gente que necesite desplazarse donde muchos otros ya lo hacen; ganar en ecología se volverá imperioso.

En ese mismo año 2050 se prevé una población de 10.000 millones de personas en la Tierra, una proyección que obliga aún más a tomar soluciones ecológicas para hacer de las macrourbes lugares habitables que presenten menores riesgos para la salud pública. Esto, además de una transformación técnica, también requiere de una adaptación sociológica que nos incumbe a todos. Tanto los más jóvenes, proclives como son a las nuevas tecnologías, como los más mayores.

Otra de las claves de cara a la movilidad sostenible es el completo desarrollo de la conducción autónoma. Cuando ésta esté plenamente disponible y la normativa adecuada a los nuevos tiempos, se espera que la reducción de los accidentes de tráfico sea de un impresionante 90%. No solamente nos desplazaremos de una manera más eficiente, sino también más segura. En cualquier caso, tampoco se espera antes de 2050.

Además de las medidas que ya hemos señalado, la construcción de grandes aparcamientos disuasorios para vehículos propios en la periferia de las grandes ciudades hará que el uso del transporte público sea más cómodo, ya que podremos desplazarnos por nuestra cuenta al lugar más conveniente.

También es importante el papel que va a jugar la bicicleta en un futuro, algo para lo que las ciudades han de adaptar su infraestructura. Es cierto que cada urbe es diferente por sus demandas orográficas, pero no hay que dejar de lado el dato que indica que, a día de hoy, son ya 2.500 millones de personas las que se mueven con este medio de transporte de forma diaria.

A pesar de la importancia que se le da a la movilidad sostenible, conviene recordar que los vehículos solamente representan el 25% de las emisiones nocivas en las grandes ciudades. Sí, nuestro parque automovilístico tiene que rejuvenecer, pues tiene una edad media de 12 años, pero existen muchos más campos en los que hay que trabajar para mejorar la calidad de vida en la urbe.

 

UNA SOLUCIÓN INTERESANTE

Toyota España ofrece a los clientes 'Pay per Drive' una fórmula de financiación accesible y flexible para el cliente. Permite pagar cualquier vehículo de la gama mes a mes más la entrada –ésta, el interés y la cuota final son variables con la posibilidad de elegir que hacer con él cuando transcurran dos, tres o cuatro años. El pago es de entre 100 y 500 euros al mes y ofrece un interés muy competitivo. Una vez se alcance el plazo de financiación existen tres opciones: cambiar el coche, devolverlo o quedarse con él. Para esto último se puede pagar lo que resta o refinanciarlo.