Mercedes conoce el valor de sus rivales gracias al análisis de datos

Es lo que han dicho tras los primeros días de test, pese a la tremenda ventaja que parecen tener las flechas de plata –que puede ser debido al polémico DAS– y el hecho de que en Ferrari parecen un tanto perdidos. Lo segundo, que los equipo B han conseguido cerrar un poco el hueco y que puede haber variado la jerarquía –esto pareció más evidente–.

Para algunos, son declaraciones ‘protocolarias’, en la línea que Toto Wolff mantiene desde hace años, avisando del peligro que representan los rivales para su dominio, destinadas a mantener la máxima atención del personal y un cierto interés por parte de la afición. Pero en Mercedes sostienen que esta es la lectura que extraen del análisis de sus datos-espía.

Mercedes ha puesto a punto una nueva arma para controlar la F1. Una especie de ‘Gran Hermano’ –como el personaje que todo lo controla de la famosa novela '1984' de George Orwell– que les permite conocer el valor real de sus rivales a partir de sus cronos en los ensayos.

Los estrategas de Mercedes han recurrido a todas las armas de las que disponen, incluida la inteligencia artificial. No debemos olvidar que Toto Wolff hace apenas un año dijo que "la utilización de inteligencia artificial era una prioridad para los mejores equipos". Les serviría para elaborar una suerte de algoritmo actualizable que les permite predecir con gran precisión las prestaciones que pueden obtener sus rivales. El hecho de pertenecer a una gran marca, que presumiblemente ya usa inteligencia artificial en sus departamentos de I+D puede ayudar.

El recurso a la inteligencia artificial es obligado dado el número de datos que se acumulan durante una prueba. Dicen que en una sola vuelta a un circuito se pueden generar 20 megabytes de datos en tiempo real y 80 gigabytes de datos acumulados en el registro embarcado, que son descargados cada vez que el coche para.

En pista, los ingenieros sólo tienen en cuenta una parte reducida de ellos, pero está claro que en fábrica se intentan analizar de forma más profunda el máximo número de datos posible y ello es imposible sin recurrir a la inteligencia artificial. Y cabe recordar que uno de los especialistas más avanzados en el tema de inteligencia artificial, Acronis, es socio de algunos equipos.

Pero también pueden usarse para procesar los pocos datos que se tienen sobre los rivales… y establecer comparaciones con los suyos propios. Rompen así el ‘tabú’ de que no se puede saber la competitividad real de sus rivales porque no se saben parámetros importantes, entre ellos el carburante usado.

"Los tiempos de los test son una mina de oro de datos si puedes estudiarlos detenidamente, incluso antes de que la jerarquía empiece a estar clara", señalan en Mercedes. Manejan datos que suministra la FOM, pero que no están disponibles para prensa o aficionados. Por ejemplo, el numero de vueltas efectuadas, el consumo por vuelta o las vueltas que llevan los neumáticos. Pero también datos del GPS que les permiten valorar la aceleración y velocidad de los monoplazas.

"Gracias a las simulaciones, conocemos la velocidad que un coche ganará en cada vuelta al aligerarse conforme van quemando combustible. También conocemos el tiempo que hará perder la degradación de los gomas cada vuelta. Y también las diferencias entre los tipos de neumáticos. Todos estos datos permiten extraer conclusiones", un análisis que está facilitado según Mercedes, porque cada equipo tiene unos hábitos fijos en su forma de afrontar las prácticas.

El análisis de estos datos es particularmente eficaz cuando se analiza la ‘simulación de carrera’ en los test, con paradas incluidas, "porque al iniciar la serie, el depósito de combustible debe estar prácticamente lleno", posiblemente este sea el parámetro más complicado de obtener.

Los datos del GPS sobre velocidad y aceleración proporcionan además valiosa información sobre los motores, sobre la potencia que ofrecen en cada momento, sobre la evolución con respecto a otras pruebas. Y sobre todo da una idea –comparando tiempos parciales– de cuando los pilotos levantan el pie de forma voluntaria para disimular el valor de sus coches, apretando en unos sectores y levantado en otros de forma alternada; el equipo sí que puede sacar conclusiones sumando convenientemente los parciales.

La integración de todos estos datos permite tener un retrato robot bastante acertado. Desde luego da una idea del nivel mínimo de competitividad. Y por supuesto ayudan mucho a elegir la estrategia más adecuada

Los técnicos de Mercedes creen que buena parte de los equipos –Ferrari y Red Bull, por supuesto– actúan de la misma forma y saben donde están los rivales o al menos tienen una idea bastante aproximada.