Quiere seguir "mandando mensajes" en México

Sainz: "Si pasas a Q3 con un Toro Rosso, que te quiten lo bailado"

Jordi Angrill
29/10/2016 12:41

Carlos Sainz tiene claro que está en un momento muy importante en su trayectoria. 2017 será su tercera temporada en Toro Rosso y, a juzgar por sus propias palabras, puede que sea la última porque el madrileño quiere pilotar un coche que le permita ganar carreras y no esperará "toda la vida" a Red Bull. Por eso, Sainz quiere seguir brillando y hacer buenas actuaciones para llamar la atención de los equipos grandes. 

Después de los entrenamientos libres del viernes, la escudería de Faenza lo volverá a tener complicado para llegar a la Q3, pues aparte de los tres equipos grandes, Williams y Force India están fuertes en el Autódromo Hermanos Rodríguez y su motor Mercedes será una gran ventaja en las dos largas rectas del primer sector. 

Llegar a la Q3 con Toro Rosso implicaría salir en carrera con superblandos - pues no hay ritmo suficiente para colarse en la última ronda de clasificación con otro compuesto - y eso sería perjudicial para el domingo. A juzgar por las simulaciones del viernes, el compuesto de la banda de rodadura roja es el que presenta una mayor degradación. No obstante, Sainz prefiere pagar ese precio a cambio de mostrar su talento. Además añade que en las carreras siempre suelen presentarse otras oportunidades. 

"Prefiero ir a la Q3 aunque sea con un superblando porque quiere decir que has hecho una vuelta muy, muy buena. Si pasas a la Q3 con un Toro Rosso en un circuito como el de México, que te quiten lo bailado. Lo que busco ahora es seguir brillando, intentar seguir mandando mensajes como el de Austin y si eso es hacer una buena clasificación y penalizar saliendo con superblandos, luego en carrera nunca se sabe qué puede pasar", explicó Carlos.

Y tiene razón. En Austin, tras la brillante Q2 que le permitió pasar a la Q3 y salir décimo, los pronósticos le situaban fuera de los puntos por el rendimiento del coche. Sin embargo, las circunstancias de carrera y sus manos le permitieron firmar una de sus mejores carreras desde que es piloto de Fórmula 1 al terminar en una magnífica sexta posición.