Montezemolo iba a ser jefe de la F1, pero Marchionne tenía otros planes
Luca di Montezemolo ha revelado esta semana, con motivo del aniversario del fallecimiento de Niki Lauda, que estuvo a punto de convertirse en jefe de la Fórmula 1. ¿Qué pasó para que el desenlace fuera otro?
Montezemolo fue presidente de Ferrari hasta 2014. Al italiano le sustituyó Sergio Marchionne, el que era entonces el presidente de Fiat. Cuando Luca dejó el cargo, asegura que Niki Lauda luchó para que se convirtiera en el jefe de la Fórmula 1. Sin embargo, Montezemolo revela que el obstáculo que evitó que se hiciera jefe del Gran Circo fue Sergio Marchionne.
El nuevo presidente de Ferrari, que dirigió la compañía hasta su fallecimiento en 2018, se opuso a que Montezemolo fuera la cabeza del deporte.
"Nunca olvidaré lo que Niki hizo por mí cuando se enteró, a través de Bernie Ecclestone, de que Sergio Marchionne se había opuesto a mi nombramiento como jefe de la Fórmula 1", cuenta Montezemolo en declaraciones al diario italiano La Gazzetta dello Sport.
"Niki quería que yo encabezara la Fórmula 1, que me convirtiese en una especie de director ejecutivo, con Ecclestone como presidente de honor, y la verdad es que estuve a un paso del mando de la Fórmula 1", añade.
Las diferencias entre Montezemolo y Marchionne son de sobra conocidas. Cada uno tenía una visión de cómo gestionar mejor Ferrari y sólo podía haber un rumbo. Esta situación hizo a Luca dejar la presidencia de Ferrari y a ello siguió una guerra dialéctica entre ambos personajes en la prensa. Más allá de este intercambio de palabras, Marchionne mostró el poder y la influencia que ganó en poco tiempo en la F1 y cuando se enteró de que Montezemolo podía convertirse en jefe de la F1, bloqueó el movimiento, algo que enfadó a Niki Lauda, según revela Montezemolo.
"Niki estaba furioso, dijo '¡Es idiota, no lo entiende! Un italiano de tu credibilidad... ¡está celoso!'", se acuerda el expresidente de Ferrari.
