Presión desde Red Bull

Horner presiona para que se apruebe el reglamento de 2017

Santi Torres
18/02/2016 12:05

Christian Horner quiere que la aerodinámica tenga más importancia y que lleguen los neumáticos anchos. En otras palabras, Horner quiere que las regulaciones planeadas para 2017 se aprueben cuanto antes. El jefe del equipo Red Bull presiona ante los nuevos rumores sobre las reglas venideras.

El británico resalta la necesidad de que los pilotos sean las estrellas del deporte, una crítica generalizada hacia la actual época de los V6 Turbo. Si las reglas se aprueban, la aerodinámica cobraría de nuevo importancia, y Red Bull saldría beneficiado. 

"Creo que Sebastian (Vettel) tiene razón con que los pilotos tienen que ser las estrellas", afirma Horner. "Tenemos la oportunidad para 2017 y es importante que lo hagamos bien. Los cambios en el chasis para 2017 deben poner énfasis en el piloto y los coches tienen que ser grandes, difíciles y potentes, que fuercen a los pilotos así se diferencian más entre ellos", expresó en la presentación de los colores del nuevo RB12.

Horner habló también de la conversación que se tuvo antes de Navidad, en la que según el británico "se llegó a sugerir que las normas siguieran tal y como están, algo que sería un desastre. Y en el último encuentro se habló de alargar la fecha límite para que no se aprobaran ideas pobres", comenta. "Nunca agradaremos a todos, pero intentando acontentar a todos acabará por diluir los cambios", añade.

A nivel político, los neumáticos entran en juego. La FIA sigue buscando brechas para meter a Michelin en la F1 de nuevo, pero Pirelli tiene contrato con la FOM. "Supongo que si no hay un contrato, todo el mundo puede marcharse, pero nosotros tenemos contrato con Bernie (Ecclestone) y la FOM, así que el resto de acuerdos llegarán en su momento", asegura el director de Pirelli Motorsport, Paul Hembery. 

El arma que Michelin utiliza es el no probar los neumáticos. Mientras Pirelli pretende hacer más test para poder bajar los segudos que la FIA busca con el reglamento 2017, los franceses afirman que eso lo pueden hacer sin necesidad de jornadas de pruebas, reduciendo el dinero invertido y agasajando a la FIA y su política de recorte de gastos.