Muestra su voluntad de arreglar las cosas

Ecclestone se sincera: "Sé lo que está mal, pero no cómo resolverlo"

Víctor Serrano
02/11/2014 00:07

La Fórmula 1 está en Austin, uno de los lugares preferidos por la mayoría de los miembros del paddock, quedan tres carreras para que acabe la presente temporada y, lo más importante, el campeón del mundo, todavía está por decidirse. Con esos ingredientes, lo suyo sería estar solo pendientes de lo que ocurre en la pista, pero el momento tan delicado que atraviesa el Mundial hace que eso sea del todo imposible.

Con dos equipos, Caterham y Marussia, que se han quedado sin viajar al continente americano por sus graves problemas financieros, y con otros que llaman al boicot del GP de Estados Unidos como forma desesperada para evitar más casos parecidos, el capitán del barco, Bernie Ecclestone, ha tenido que salir a dar la cara después de la calificación para mostrar su voluntad de arreglar todo este desaguisado.

La gente que está involucrada en la F1 y que quiere cuidarla tendrá que sacrificarse

Primero ha querido dejar claro lo que más urge, que la carrera en el Circuito de las Américas se celebrará con total seguridad. No habrá boicot. Otro tema es que pueda evitar que se caiga algún equipo para 2015, algo que no asegura. "Olvidar esa basura, prometo que los equipos competirán. Correrán, os lo garantizo, pero estoy preocupado por si podrán hacer el próximo año", recogen corresponsales de medios como el Daily Mirros o Press Agency.

Mr. E sabe dónde está el problema, aunque no resolverlo: "Francamente, sé lo que está mal pero no cómo solucionarlo". No quiere quedar como el villano de la película y por eso pide la colaboración de todos para solventar esta crisis: "Tenemos que abrir los ojos de la gente. Yo no quiero estar en un posición en la que fuera demasiado fuerte, la Fórmula 1 desapareciera y se dijera que fue por mi culpa".

Hay demasiado dinero mal distribuido, y puede que sea por mi culpa

Una de las soluciones que está dispuesto a tomar para comenzar a encaminar las cosas es reducir sus honorarios, algo que también invita a hacer a las escuderías más poderosas de la parrilla. Si ellos lo hicieran, él lo haría sin dudar, porque cree que es del todo necesario que "la gente que está involucrada en la Fórmula 1 y que quiere cuidar de este deporte tendrá que estar dispuesta a hacer sacrificios". Y ése, sería el primero.

Ecclestone no ha reusado su parte de culpa en este asunto. "Probablemente hay demasiado dinero mal distribuido, y puede que sea mi culpa", asume el magnate británico de 84 años recién cumplidos, pero asegura que ahora mismo no puede hacer nada porque está atado por los contratos vigentes con los equipos. Eso sí, si por el fuera rompería todos y empezaría una distribución más justa. Voluntad hay, palabras también, solo faltan hechos.