Alonso tiene el visto bueno de la FIA para correr en Austin
Fernando Alonso ha recibido el visto bueno para competir este fin de semana en el GP de Austin. El español ha tenido que pasar una revisión en el centro médico del circuito americano, como consecuencia de los 28G que tuvo que soportar en la pasada cita de Abu Dabi cuando saltó por los pianos intentando ganar la posición a Vergne tras su segunda parada de boxes, y la ha superado sin problemas.
Eso sí, el asturiano no está recuperado de sus dolores de espalda al cien por cien y hoy ha cancelado la sesión rutinaria con los medios que siempre hace los jueves de gran premio para acudir a su hotel y descansar. El objetivo es estar en las mejores condiciones para subirse al monoplaza en la sesiones de entrenamiento de mañana, para lo que Fernando ha declinado tomar algún tipo analgésico.
Desde que se supo que aquella acción del trazado de Yas Marina había provocado una serie de dolores en la espalda a Alonso, cuando su mánager Luis García Abad publicó la foto del piloto de Ferrari inmovilizado en una camilla, surgieron algunas dudas sobre su estado. Pero Fernando siempre ha tenido claro que iba a participar en la carrera de Estados Unidos, incluso colgó una foto en Twitter como protagonista de Walker Texas Ranger para avisarnos.
Si Alonso se ha sometido a diferentes pruebas ha sido por las exigencias que pide la FIA en este tipo de situaciones en las que se alcanza una Fuerza G fuera de lo normal. Cualquiera que hubiera sufrido un impacto de este tipo habría sufrido daños muy serios, pero la preparación de los pilotos les hace ser de otra madera. Aun así, siempre se hacen chequeos para descartar posibles lesiones. Alonso, a pesar de los mareos y las fuertes molestias en la espalda y las cervicales, los ha pasado todos y luchará con su Ferrari para mantener su subcampeonato y para poder dar caza a Mercedes.
