Bandera roja o VSC, una decisión que no fue inocua
Muchos aficionados se preguntan la razón por la cual Niels Wittich, director de carrera, no sacó bandera roja en el accidente de George Russell y ‘se conformó’ con un coche de seguridad virtual –VSC–. Ni siquiera un ‘safety car’, aunque quizás para esto no quedaba ya tiempo: los dos Ferrari de cabeza podían estar ya muy cerca de la recta de meta.
En unos tiempos que las banderas rojas se han sacado con cierta profusión y discrecionalidad –el año pasado hubo muchas críticas por ello– por cosas mucho menores que el accidente de Russell, uno no entiende la razón de la decisión.
Sin poder recurrir al safety, quizás simplemente no se quiso acabar ‘antes de tiempo’ la carrera, aunque está claro que la posición del Mercedes era realmente delicada, en el centro de la pista y en una ‘S’ de gran velocidad.
Unos dirán que, dada la prohibición de adelantar, nada cambiaba entre VSC y bandera roja. Pero, por el contrario, la diferencia es brutal.
Con bandera roja, la clasificación final de carrera hubiera sido la de la vuelta 56. Russell hubiera acabado séptimo, sumando seis puntos, ocho tras la penalización a Fernando, y estaría amenazando a Norris y Piastri en la Clasificación de Pilotos en lugar de verse amenazado por Alonso. Magnussen no hubiera sumando ningún punto. Tsunoda y Stroll, dos menos de los que han sumado al final.
Y en el de constructores, Mercedes no estaría amenazada por Aston Martin y además un poco más cerca de McLaren. Y Haas en lugar de tener cuatro puntos tendría dos y RB, sólo dos… que con lo difícil de entrar en los puntos que está ahora para el segundo pelotón les deja más a merced de una reacción de Williams o Alpine.
Reglamento en mano, el director de carrera tenía potestad para tomar la decisión. Pero está claro que estas decisiones no son inocuas, que influyen en el resultado de las carreras… y en el campeonato. Y si no, que se lo expliquen a Lewis Hamilton por aquel GP de Arabia Saudí 2021, clave para el primer título de Max Verstappen.
