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Renault enseña su fábrica, ya con un protocolo contra coronavirus

20/04/2020 16:45

Renault reabrió sus fábricas de Valladolid y Sevilla el pasado 16 de abril, con lo que se convirtió en el primer fabricante en reanudar su actividad en España tras el pico de la pandemia del coronavirus. Ahora, una visita de las autoridades de la compañía ha permitido tener un testimonio gráfico de cómo está la instalación en estos momentos.

El presidente de Renault España, José Vicente de los Mozos, ha visitado este lunes la factoría de motores de Valladolid en compañía del director de Fabricaciones y Logística del Grupo Renault. El objetivo era comprobar en persona cómo es el protocolo de seguridad que ha implementado la marca del rombo.

La marca del rombo toma la temperatura a sus empleados antes de que accedan a sus puestos de trabajo. Estos también reciben un curso de formación específica para informarse sobre los nuevos procedimientos, como por ejemplo la obligatoriedad de usar mascarilla.

Las imágenes que han trascendido muestran parte de esta nueva filosofía. Por ejemplo, en el área de oficinas los empleados dejan espacios libres entre ellos para guardar la distancia de seguridad. Todos llevan puesta la mascarilla. Cada mesa cuenta con equipamiento de limpieza, en este caso un desinfectante, alcohol y papel.

Otra imagen les muestra en un área común improvisada, con asientos convenientemente separados para evitar riesgos.

"La salud de sus trabajadores ha sido la prioridad del Grupo Renault desde que se inició la pandemia del Covid-19 en nuestro país. Por este motivo he querido venir personalmente a la factoría de Motores de Valladolid donde he quedado impresionado por la serenidad, así como por la profesionalidad de todos los trabajadores. Quiero resaltar el respeto y cumplimiento de todas las medidas preventivas que hemos desplegado en las oficinas, en la ingeniería y en los talleres", apuntó José Vicente de los Mozos durante la visita.

El presidente también ha explicado que la producción tanto de la planta de Valladolid como la de Sevilla está orientada a satisfacer el mercado de Corea, China o Rusia, donde sí se mantiene la actividad.