En Estados Unidos, las marcas de coches escuchan a Donald Trump
Las grandes marcas de coches se preparan para volver al trabajo en Estados Unidos, a pesar de que el país tiene todas las papeletas para convertirse en los próximos días en el principal foco de infección del coronavirus. El presidente Donald Trump quiere reactivar la economía el 12 de abril para tratar de mitigar el impacto financiero de la pandemia.
Las firmas cerraron a mediados de mes. Su objetivo inicial era volver el 30 de marzo, pero todas han revisado sus previsiones y han prolongado la interrupción hasta el mes de abril. Su nueva estimación es acorde a la petición gubernamental, pero no es descabellado que la reconsideren de nuevo si la situación de la crisis lo requiere.
Ford tenía previsto volver el día 30, pero ahora ha dicho que su factoría mexicana de Hermosillo reabrirá el 6 de abril y que sus centros estadounidenses —Dearborn, Kentucky, Kansas City, Ohio—regresarán el 14 de abril. Dos días después de la fecha señalada por la administración del país, si la cadena de suministros lo permita.
El Grupo FCA también quiere volver el 14 de abril. Fiat-Chrysler ha confirmado al menos dos víctimas mortales por coronavirus entre su plantel de trabajadores.
Toyota se ha marcado en rojo la fecha del 17 de abril. La compañía japonesa está presente en Alabama, Indiana, Kentucky, Missouri, Tennessee y Texas, y también posee varios centros productivos en México.
Honda es más optimista, pues estima que el 7 de abril podrá reanudar el trabajo en todos sus centros en Norteamérica. Aun así, en un correo interno a sus trabajadores ha reconocido que evaluará el estado de la pandemia en cada momento, lo que significa que aún sería posible un nuevo cambio de planes si la crisis lo requiere.
Quien todavía no se ha pronunciado es General Motors.
