BMW sabe que la parrilla del Serie 4 es polémica, pero no la cambiará
BMW ha tomado nota de las críticas que ha recibido por la parrilla vertical del nuevo Serie 4, pero deja claro que las opiniones externas no afectarán a su estrategia comercial. Adrian van Hooydonk y Damagoj Dukec, su vicepresidente de Diseño y responsable de diseño respectivamente, explican que creen en su producto y que la solución actual les ayuda a distinguirse del resto en la carretera.
Pocos coches contemporáneos han sido tan polarizantes como el nuevo BMW Serie 4, que suscitó un gran debate en las redes sociales cuando se presentó en junio de 2020 por su parrilla delantera sobredimensionada. Un elemento puramente estético que no responde a un criterio técnico y que de paso rompe con la tradición de la marca.
BMW tenía tan claro que ésta era la dirección correcta que, tan sólo unos meses después, redobló la apuesta con la presentación del nuevo iX 2021, que trasladaba el concepto del Serie 4 a un SUV eléctrico de grandes dimensiones. Van Hooydonk y Dukec creen que es mejor no prestar demasiada atención a los críticos.
"Si lo que quieres es crear algo que destaque, entonces has de conseguir diferenciarlo y tiene que ser distinto. Si quieres llegar a ciertos clientes, tienes que destacar. Nuestro objetivo no es satisfacer a todos los clientes del mundo, sino satisfacer a los nuestros", explica Dukec en declaraciones a la revista británica Autocar.
Y el problema aquí es que el nuevo diseño es rompedor con el pasado de la marca. "Siempre habrá una cierta fricción cuando tu producto ha tenido mucho éxito. Es lo que estamos viendo", añade Van Hooydonk. "Pero si tu éxito no está ahí, entonces tienes que cambiar. Es mejor tener esta situación de estrés –que un rendimiento comercial a la baja–".
"Es fantástico tener aficionados, porque son gente que no sólo compra tu producto, sino que aman lo que haces. Para ellos, es algo emocional. Y es natural que, si les encanta lo que haces, quizá se molesten si haces un cambio. Nuestro trabajo no es fácil. Hay muchos actores nuevos en el mercado y podemos quedarnos atrás si nos quedamos quietos".
En conclusión, el objetivo de BMW es "conseguir que la compañía siga adelante, pero sin perder el contacto con su base de aficionados". Eso a pesar de que las críticas de las redes sociales "pueden ser brutales", como admiten tras los primeros meses desde la presentación del Serie 4. El diseño, pues, seguirá.
