TECNOLOGÍA

Guía a la electricidad: ¿qué es un coche mild-hybrid o microhíbrido?

06/06/2020 09:30

Comenzamos una serie de artículos que aparecerán a lo largo de las siguientes semanas. En ellos desgranaremos las características, virtudes y debilidades de las distintas opciones que el mercado ofrece en cuanto a vehículos con distinto grado de electrificación. Para empezar tenemos a los modelos microhíbridos o mild-hybrid, que se caracterizan por contar con un pequeño sistema eléctrico de apoyo al motor térmico.

La automoción debe reinventarse cada día con el objetivo de llegar finalmente a una movilidad sostenible y medioambientalmente viable con emisiones contaminantes cada vez más reducidas. Sacar el mayor provecho a la eficiencia del motor de combustión es una necesidad imperiosa en los tiempos que corren, para ello, los fabricantes recurren a distintas técnicas, y una de las que mejores resultados dan a día de hoy es la de la micro–hibridación.

 

CARACTERÍSTICAS

Los coches microhíbridos, 'mild–hybrid' –MHEV– o con sistema de hibridación ligero son el primer nivel en la pirámide de la electrificación, en cuya cúspide se encuentran los vehículos 100% eléctricos. La principal característica de los microhíbridos es que cuentan con un pequeño motor que se encarga de dar apoyo al térmico, pero que no es capaz de propulsar al coche por sí solo mediante corriente eléctrica.

El esquema de este tipo de vehículos es como el tren motriz de un eléctrico corriente, pero a un tamaño reducido. Cuenta con un pequeño motor que puede ir conectado con la correa de distribución, ubicado a la salida del cigüeñal o en la propia transmisión, siempre alimentado por una pequeña batería. Todo el sistema funciona a una tensión nominal generalmente de 48 voltios, que llega hasta los 160 en modelos especiales. Las cifras de potencia en las que ronda este sistema están en torno a 10-20 kilowatios –entre 13 y 27 caballos–.

La función de este sistema es simplemente apoyar al motor de combustión en momentos donde su trabajo es más crítico y, por tanto, sus emisiones. Esto es, por ejemplo, durante las salidas desde parado. No es un sistema que pueda recargarse de manera externa –no es enchufable–, por lo que se recarga mientras conducimos.

En este sentido, cabe mencionar las funciones que suele ofrecer todo modelo con esta motorización:

  • Sistema Stop/Start
  • Frenada regenerativa
  • Recuperación de energía –al circular a vela–.

 

VENTAJAS E INCONVENIENTES

Las mayores ventajas de esta tecnología se encuentran en su propia concepción de formato reducido. Es la forma de electrificación más sencilla, menos costosa y adaptable a toda tipología de vehículo, ya sea por tamaño o combustible. Por ello, es cuestión de tiempo que la inmensa mayoría de los fabricantes la incorporen en los modelos de acceso a la gama. Según Continental, la progresiva implantación de los motores 'mild–hybrid' conllevará unas cifras de ventas de 25 millones de unidades en el año 2030.

La electrificación trae consigo una mejora en las emisiones que oscila entre el 13 y el 22% en la reducción del CO2 emitido comparado con un vehículo equivalente. Se trata de unas cifras remarcables para la relativamente sencilla integración de este sistema en el tren motriz.

Finalmente están los beneficios para el conductor, que no debe realizar ninguna acción adicional con respecto a un coche con motor térmico convencional para que pueda notar los beneficios de esta tecnología. Los consumos también se reducen de un 5 al 10% y, además, según los estándares actuales de la DGT estos vehículos son merecedores de la etiqueta ECO, lo que conlleva beneficios de circulación y ciertas ventajas fiscales.

Por contra, si lo que se busca es una movilidad completamente silenciosa y amable con el medio ambiente pero a un precio reducido con respecto a los híbridos puros y eléctricos, los microhíbridos no son la solución.