Red Bull debe ganar en Hungría o el Mundial será un paseo para Mercedes
Antes de comenzar la temporada, Helmut Marko estaba eufórico. Estaban convencidos de que tenían el mejor coche que había hecho nunca Adrian Newey. Pero la eficiencia de los Mercedes en Austria les ha sorprendido y sumido en algunas dudas. Simplemente esperaban estar más cerca de los Mercedes.
Newey ha sido siempre un domador del viento. Sus coches, en muchas ocasiones, han mostrado una velocidad punta escasa, pero el tiempo de vuelta era espectacular gracias a su velocidad de paso por curva. Adrian explicó en su día que "la elección del equilibrio entre carga y resistencia aerodinámica la toma tras estudiar los circuitos que conforman el calendario y elegir la más eficaz para el conjunto del Campeonato".
Max Verstappen había ganado en Austria en 2018 y 2019, pese a las rectas del circuito; en los toboganes de bajada impresionó. Pero este año no ha podido nada contra Lewis Hamilton y tampoco ha podido resistir el empuje final de Valtteri Bottas en Estiria; si los Mercedes no han sumado dos dobletes es sólo por la penalización de Lewis en la primera de las dos carreras… aunque quizás el coche de Max sin problemas aerodinámicos debido a un toque podría haber resistido… si bien el de Países Bajos lo duda "porque simplemente no fuimos lo suficientemente rápidos".
En Red Bull saben que Hungría es la prueba del algodón. El año pasado Max hizo la Pole y parecía encaminado al triunfo cuando una parada de última hora de Hamilton para poner neumáticos nuevos y más blandos permitió al británico volar y superar a Verstappen a tres vueltas del final.
Tras Hungría vienen dos carreras en Silverstone, Barcelona, Spa y Monza. Cinco Grandes Premios favorables a Mercedes en el que suman a la eficacia de su coche la ventaja de tener un motor más potente que el Honda del equipo austríaco –unos 20 caballos de potencia más–. La temporada quedará así, salvo sorpresa o imponderables, vista para sentencia, cosa de los dos pilotos de Mercedes. Y lo que es peor, con las pocas cosas que en teoría se pueden cambiar para 2021 –aunque la aerodinámica es una de ellas– también este año parece ya encaminado para los de la estrella. Por eso para Max y Red Bull es tan importante la carrera de este domingo.
En realidad sólo Verstappen puede poner sal y pimienta en este campeonato, salvo una batalla fratricida entre los pilotos Mercedes. Alex Albon no es suficientemente rápido para estar a la altura de Max y los Ferrari ni están ni se les espera. Los demás, bueno, son de otra división, inferior por supuesto.
