Ferrari está de test en Imola... ¿para probar su motor nuevo?

16/09/2021 17:09

Ferrari está de test privado en Imola, Italia. Charles Leclerc está hoy a los mandos de un SF71-H, mientras que mañana se espera que sea Carlos Sainz quien tome el relevo con el coche de 2018.

Fuentes de Imola recogidas por Formulapassion.it señalan que Leclerc se ha visto obligado a parar en boxes por un problema aparentemente de motor –se vio salir algo de humo por la toma de aire–, aunque se esperaba que puede rodar por la tarde.

El test, que para ser legal tiene que ser con un coche de al menos dos años de antiguedad, ha sorprendido por lo inesperado de su naturaleza. Para algunos, la prueba podría tener relación con las mejoras de la unidad de potencia y el combustible que Ferrari tiene previsto introducir en Turquía, e incluso disponer de algunas soluciones que están en estudio para el propulsor de 2022.

Como se sabe, Ferrari sufrió un duro golpe cuando la FIA, a través de una directiva, introdujo algunas puntualizaciones en las regulaciones que debieron cumplirse tras el GP de Italia de 2019, y que hicieron que el motor de la Scuderia perdiera potencia y el pasado año resultara anémico. La directiva surgió tras las protestas de otros equipos por el motor italiano y una inspección en fábrica, cuyos resultados de la encuesta se han mantenido en secreto.

Otra teoría es que Ferrari ha rodado en Imola para buscar mejorar la correlación de datos aerodinámicos de sus alerones, tras los problemas que han tenido en las últimas carreras. La correlación se refiere a los datos obtenidos en el simulador comparados luego con los efectivos en pista.

Aunque hay prohibición de test con un F1 actual, no está claro que la prohibición alcance a los motores y mucho menos si todavía no están homologados, como sucedería en la unidad de potencia evolucionada para Turquía. Y tampoco deberían contar para el límite de horas de banco de pruebas que la F1 ha introducido.

Todo ello es lo que hace sospechar que la unidad de potencia que ha rodado hoy podría tener las nuevas evoluciones previstas.

En el pasado Ferrari recurrió a montar nuevos motores en otros vehículos, incluidos algún GT, para probarlo. Y Toyota, cuando quiso entra en F1, realizó numerosos test con el motor instalado en el prototipo que usaban en Resistencia.