Almacén F1

GP de España F1 2017: Hamilton y Vettel, cara a cara

José Miguel Vinuesa
15/05/2017 17:07
La llegada de la Fórmula 1 a Europa supone tradicionalmente la implementación de mejoras en los monoplazas, pese a que en los tiempos más recientes el desarrollo de los coches es algo que se realiza de manera mucho más constante, carrera a carrera. Pero aun así, el Gran Premio de España suele ser el lugar en el que se lleva a cabo una primera gran actualización en todos los equipos.

El más sorprendente en este campo fue Mercedes, que traía un coche prácticamente nuevo, y que se detectaba visualmente en el morro del W08, ahora mucho más estrecho y con unas aletas en forma de cuchara en la parte inferior. Obviamente, la cercanía y puntual superioridad de la Scuderia Ferrari obligó al equipo alemán a realizar una de las actualizaciones más profundas que se recuerdan en los últimos tiempos.

Porque aunque Mercedes, con Valtteri Bottas, venció en Rusia, no había sido el mejor coche: ese fue el Ferrari SF70-H, que también traía importantes mejoras a Barcelona. Un circuito demasiado conocido para todos, y en el que en los entrenamientos invernales la Scuderia había mostrado un rendimiento mejor que Mercedes.

 

VIERNES

Los entrenamientos libres del viernes dejaron la impresión de que Mercedes había vuelto a obtener su habitual dominio, con una ventaja de Hamilton sobre el tercero, Kimi Räikkönen, de 0'935 segundos en la primera sesión. El nuevo motor del Mercedes, unido a las mejoras, se mostraba intratable. No se podía decir lo mismo del motor Honda del McLaren MCL32 de Fernando Alonso, que en los primeros compases rompía estrepitosamente, y dejaba caer a chorros el aceite cuando era retirado de la curva 3 del circuito. Alonso hablaba después de un espectacular agujero en la unidad de potencia. Este nuevo inconveniente provocaba la imagen del Gran Premio: la de Alonso yéndose del circuito para jugar a pádel con la primera sesión de libres en marcha, mientras le sustituían el propulsor.

Tampoco fue del todo bien para Sebastian Vettel, con un problema que parecía de cambio, pero que se reveló menos importante, y que le privó de rodaje durante buena parte de la sesión. Los Ferrari eran mejores que los Mercedes en el segundo sector del circuito, que incluye alguna curva de pura exigencia aerodinámica como la 9, la ciega de derechas. Sí, el Ferrari iba bien, pero no lograba encontrar los tiempos. En buena medida, pero esto afectó a todos, el viento racheado complicaba la puesta a punto de los coches.