La marca francesa, determinada por cambiar la situación

White califica de "inaceptables" los problemas de Renault en Jerez

Miguel Carricas
02/02/2014 10:36

Una vez superados los test de Jerez, es tiempo de analizar y obtener las conclusiones pertinentes para afrontar la próxima jornada de pruebas en Baréin con garantías en cuanto a la optimización de los nuevos motores V6 Turbo. No obstante, en la fábrica de Renault Sport se presentan unas semanas de exhaustivo trabajo en las que solucionar los problemas eléctricos registrados por sus propulsores supondrá la única alternativa si no quieren alejarse del rendimiento de la cabeza de carrera antes del Gran Premio de Australia.

La marca francesa dio por finalizada su primera toma de contacto con la nueva era de la F1 convirtiéndose en el proveedor que registró los mayores problemas de fiabilidad de la parrilla, y es que en cuatro días de pruebas no han sido capaces de acumular más de 151 vueltas entre sus tres equipos clientes; Red Bull, Toro Rosso y Caterham.

El principal motivo de su limitado rodaje pasaría por un fallo en la integración de algunos componentes eléctricos en sus nuevos propulsores. De este modo, y pese a que las averías más significativas se sucedieron en la jornada del miércoles, no fue hasta finalizar la tarde del viernes cuando la marca de Viry percibió que el diseño de sus motores proseguía originando problemas, lo cual alimentaba los rumores sobre una posible desventaja respecto al resto de la parrilla.

En este sentido, Rob White, director general adjunto de Renault Sport F1, ha asegurado que el fallo mecánico registrado en Jerez procede de una sucesión de pequeñas averías que han comprometido en gran medida el rendimiento óptimo de sus motores.

"Las causas no son sencillas: no hay un componente único o sistema que haya causado un problema en especial. Un número de cosas han dado problemas, principalmente en lo que respecta al control y operación de varios subsistemas de la unidad de motor dentro del coche", ha revelado.

Preguntado por la capacidad de reacción de la marca ante tales incidencias, White ha relatado que: "entre los días 1 y 2 implementamos, con la ayuda de Red Bull, un nivel avanzado de hardware para el resto del test con el fin de abordar el problema dentro del almacenamiento de energía"

 

Cada kilómetro de rodaje cuenta, según White

Aparentemente, tal intención de mejora no se reprodujo en una asidua aparición sobre la pista por parte de sus escuderías cliente, en especial de Red Bull, el cual decidió abandonar el circuito horas antes de concluir la jornada ante la gravedad de los problemas que la unidad motriz causaba para los intereses del RB10.

En este sentido, el mandatario británico ha expresado que la limitada acumulación de kilómetros no impedirá a Renault analizar los datos obtenidos con el fin de encontrar una solución definitiva en Baréin: "Absolutamente, y a estas alturas cada kilómetro es altamente valioso. Reconocemos que cuando los coches han rodado, no han rendido a un nivel aceptable. Estamos lejos del tipo de operación que habíamos planeado y preparado, pero toda la información es útil. Esperamos tener una solución más definitiva para la próxima sesión en Baréin", explica.

De vuelta a la situación de Red Bull, White ha insistido en que la reacción de todos sus monoplazas cliente bajo las capacidades de los V6 Turbo no debería variar en gran medida, por lo que la entidad francesa se dedicó a paliar las carencias generales que ofrecían los propulsores antes de centrarse en fallos puntuales originados por el diseño defectuoso de algún chasis.

"Varios problemas son comunes a todos, ya que la unidad de potencia es la misma especificación en todos los coches excepto por pequeñas diferencias de instalación. No hemos dejado de solucionar algún problema fundamental, aunque tenemos que reconocer que nuestro limitado rodaje hace imposible ser certero"

El aparente paso atrás experimentado por Renault al inicio de la pretemporada no ha llevado a White a criticar las bases del nuevo reglamento, más bien al contrario, pues el británico ha subrayado la necesidad de regenerar las características del deporte para poder aplicarlas de manera eficiente al resto del automovilismo.

"Sí, absolutamente. Las reglas de las unidades de motor son un reto masivo pero también una oportunidad, y son altamente importantes en posicionar a la Fórmula 1 de vuelta a la vanguardia de la tecnología. Tenemos los instrumentos necesarios y la determinación para obtener éxito"

Con los esfuerzos centrados en los próximos test de Baréin, la ambición por devolver a sus clientes el rodaje perdido a lo largo de los últimos días constituye, a día de hoy, el único objetivo que baraja el británico antes de arrancar la preparación formal para la nueva temporada.

"El paso que tenemos que dar es alcanzar un nivel aceptable de rendimiento que el que nos hubiera gustado. Es inaceptable que no hayamos sido capaces de eliminar los problemas lo suficiente para permitir a nuestros clientes rodar lo máximo posible. Estamos trabajando duro para corregir esto a tiempo para Baréin y compensar las cosas", ha comentado.