No cree que sea el mejor momento para ir a Maranello

Berger no ve la llegada de Vettel a Ferrari: "Ni Alonso ha ganado allí"

Víctor Serrano
15/10/2014 18:57

Todo indica que así será, que Sebastian Vettel abandonará el equipo que le hizo alcanzar la gloria en las últimas cuatro temporadas con un monoplaza histórico para recalar en una Scuderia Ferrari que está en sus horas más bajas. Pilotar para el equipo más legendario de la parrilla es un sueño para cualquier piloto del paddock, pero ¿merece la pena llegar a Maranello para conducir un coche que lleva sin estar a la altura unos cuantos años?

Esa es la pregunta que muchos se hacen, entre ellos Gerhard Berger. El austríaco conoce bien a la escudería del Cavallino Rampante, vistió durante seis años con sus colores, y le sorprende que el alemán se vaya allí en este momento. "El reto que Sebastian está asumiendo es uno de los más grandes que se puede tener en la Fórmula 1. Incluso Fernando Alonso, uno de los mejores en el negocio, no ha sido campeón del mundo allí", ha declarado en Sport Bild.

En mi opinión, la situación en Ferrari en estos momentos es un muy turbulenta

Es cierto, a pesar de sus enormes esfuerzos por llevar a un mediocre monoplaza a cotas que no merecía el bicampeón asturiano no ha sido capaz de ganar en sus cinco años de rojo, ni lo hará, puesto que su marcha es del todo segura. Ni su mejor pilotaje, que alcanzó en una sobresaliente temporada de 2012, le permitió llevarse el premio. Por eso, Berger se cuestiona que si Alonso no ha podido hacer frente a ese coche, difícilmente podrá hacerlo alguien más.

Así, Gerhard no piensa que esta sea la mejor época para fichar por Ferrari, por muchas ganas que tengas de ser unos de los pocos elegidos que forme parte de la escudería italiana. De hecho, si no fuera porque Christian Horner lo dijo y porque es lo más evidente, no se lo creería: "En mi opinión, la situación en Ferrari en estos momentos es un demasiado turbulenta. Yo no habría creído que Vettel se fuera allí en este momento".

Sin embargo, las razones que lleven a Seb a asumir el riesgo de tener un monoplaza poco competitivo pueden ser muchas y de peso. La relación idílica que tenía con su equipo se ha ido desgastando con la llegada de Ricciardo, ha perdido el feeling con su coche, quiere renovar su ambición con nuevos retos… Todo eso y más han motivado la marcha del tetracampeón de su lugar natural en la F1. Eso sí, tendrá que tener más paciencia que nunca si quiere triunfar de rojo.