Los pilotos piden una garantía de la seguridad de los Pirelli en Spa
Los pilotos de la categoría reina han unido fuerzas y han pedido garantías a la FIA de la seguridad de los neumáticos Pirelli, después de que en el día de ayer la marca registrara tres pinchazos y diversos cortes en sus gomas.
La inestabilidad de los P-Zero volvió a tomar protagonismo en la reunión del viernes de la asociación de pilotos, la GPDA, una entidad que hace un mes ya amenazó con el boicot en Alemania a raiz de las explosiones de Silverstone y que, ahora, podria plantearse un llamamiento similar en caso de que la respuesta del órgano rector no le sea satisfactoria.
"Necesitamos respuestas y la suciedad de la pista no son la respuesta", cita 'The Daily Mail" a Mark Webber.
Pese a que Pirelli no tardó más que unas horas en aseverar que tales problemas eran "completamente diferentes" a los de Reino Unido, los competidores no han vacilado y han solicitado una aclaración por escrito al delegado técnico de la Federación con tal de cerciorarse de que es seguro proseguir con el Gran Premio.
"No estamos hablando de un escenario como Silversonte", dijo Paul Hembery. "Desde los primeros análisis aparecieron que ambos pinchazos (el de Vettel y Alonso) fueron causados por un factor externo, probablemente de la pista. Es una preocupación para el deporte porque tenemos que encontrar qué es".
Sobre la posibilidad de que la suciedad ed la pista pudiera ser el causante de los pinchazos, Hembery niega toda relación: "No hay mucho que podamos hacer con eso", le cita 'The National'. "Hemos visto muchos signos en otros neuma´ticos, pequeños cortes superficiales, así que hay claramente algo. No puedo deciros qué es, pero viene de un factor externo".
Charlie Whiting es quien tiene ahora la palabra, y su respuesta llegará durante la mañana de hoy después de que anoche participara en una inspección de la pista junto a Pirelli para dictaminar qué originó los dos orificios del neumatico de Fernando Alonso que desembocaron en el pinchazo del mismo.
Después de ser reforzados con una estructura de Kevlar y de retornar a la construcción de 2012, los Pirelli se enfrentan al mayor reto restante de la temporada en Spa-Francorchamps, un circuito donde las elevadas cargas que han de soportar los cauchos, de hasta 1000 kilogramos en el viraje de Eau Rouge, sacan a la luz cualquier posible carencia de los mismos.
