El aussie se sincera sobre su adiós

Webber: "Probablemente me voy de la F1 un año antes de tiempo"

Víctor Serrano
16/09/2013 11:38

Renunciar a aquello que llevas haciendo durante los últimos doce años de tu vida nunca es fácil, y mucho menos cuando eso que haces es lo que te gusta, para lo que has nacido, es lo que te da la vida. Por eso, a Mark Webber le asaltan las dudas sobre si realmente ha hecho bien en dar por terminada su dilatada trayectoria en la Fórmula 1: "Probablemente me voy de la F1 un año antes de tiempo".

Pero, a veces, hay momentos en la vida en los que debes tomar una decisión difícil y no mirar atrás, y Mark cree que ha llegado el suyo: "Pero con los cambios de la próxima temporada y la oportunidad de unirme a Porsche, es el mejor movimiento para mí". El australiano se sincera sobre su adiós de la cúspide del automovilismo en la revista 'F1 Magazine' y reconoce que le sigue gustando subirse a su monoplaza: "Todavía me gusta estar ceñido en el coche y conducir a través de la calle de boxes".

He estado en el límite con la F1 durante el último par de años

No obstante, es mejor dejarlo con buen sabor de boca y sabiendo que tú has tomado la decisión a verte obligado a abandonar porque ya nos das la talla. "Es un poco decepcionante, pero he hablado con algunos deportistas muy buenos que han estado en una encrucijada en la que realizar la llamada [abandonar] no era fácil y lo estropearon", razona Webber. Saber cuándo ha llegado tu momento es un don. Otros se niegan a ver la realidad y luego ésta les azota de golpe, sino que le pregunten a Schumacher sobre sus últimos tres años en Mercedes…

"He estado en el límite con la F1 durante el último par de años", asegura el piloto de Red Bull, que reconoce que le costaba encontrar la motivación para seguir adelante: "Tienes que transformarte cada invierno porque el fuego en el vientre no es el mismo que cuando tenía 24 años". La falta de motivación, algo que hace años no se le pasaba ni por la cabeza: "Recuerdo haber oído algo acerca de los deportistas hace años. Decían que hasta que pudieran mantener su motivación, seguirían empujando. Nunca pude averiguar lo que eso significaba. ¿Cómo podrías perder tu motivación? Pero las preguntas me llegaban mucho más a menudo que nunca en el pasado".

Renovarse cada año es una tarea complicada y tener a un obstáculo tan grande como Sebastian Vettel a tu lado lo dificulta aún más. Por eso, cuando ya no ves margen de mejora en tu carrera no puedes dejar de pensar que ya ha llegado el momento de dejarlo. "No se trata de conducir o competir, se trata de mantener mi propio programa en la F1 durante 11 meses al año. Y eso solo lo tienes hasta el punto en que se sientes que has logrado muchas cosas", dice el aussie.

El fuego en el vientre no es el mismo que cuando tenía 24 años

El ritmo vertiginoso de vida de un piloto de F1 satura hasta agotar. Esa es otra de las razones que Webber ha tenido en cuenta para abrazar una vida más tranquila: "Viajes y hoteles, y probablemente la naturaleza repetitiva del trabajo. También un poco de los medios. Montones y montones de cosas pequeñas que te hacen feliz cuando las haces frente con los ojos brillantes y una tupida cola".

Todas estas cosas solo pueden llevarte a un único destino: "Al final, te obligas a hacerte la pregunta: '¿Tengo que estar aquí haciendo esto?' Entonces Porsche llegó y pude mirarme a los ojos y decir: 'Bueno, sabes qué, probablemente no tengo que hacer más algunas de esas cosas". Quedan siete carreras para que diga el último adiós a su pasión, seguramente con lágrimas en los ojos. Disfrutemos de él hasta entonces, porque la F1 será un poquito menos grande sin Mark Webber.