WEC: La Resistencia pone rumbo al Infierno

20/07/2016 16:49

El Campeonato del Mundo de Resistencia afronta este fin de semana las 6 horas de Nürburgring. Un mes después de las dramáticas 24 horas de Le Mans, Porsche, Audi y Toyota vuelven a ponerse en marcha para encarar una recta final de temporada que se presenta igualada, impredecible y, como es costumbre con los prototipos, emocionante. 

Será la segunda carrera del WEC en el Nürburgring, un lugar con una dilatada historia con la resistencia. Sus 6 horas entraron en el calendario del Mundial de Coches Deportivos en 1953. Permanecieron hasta 1991 antes de volver en 2000 como parte de la American Le Mans Series y, en 2001, con las Le Mans Series, germen del actual Mundial de Resistencia. En 2015 hicieron el salto al World Endurance Championship.

En LMP1, el principal atractivo se encuentra en los reglajes de los tres coches insignia. El 919 Hybrid, el R18 y el TS050 estrenarán una configuración de alta carga aerodinámica para optimizar su paso por curva en un circuito mucho más revirado y técnico que los anteriores. Este nuevo set-up arroja incertidumbre al potencial de cada máquina y convierte en arriesgada o precipitada cualquier predicción en base a lo visto en La Sarthe.

 Otro punto de interés estará en el Audi número 7. Benoït Tréluyer se perderá la carrera por una lesión en la espalda. Sus compañeros André Lotterer y Märcel Fässler harán un esfuerzo extra y pilotarán el R18 como un dúo, no un trío. Más horas al volante y estrés para unos hombres que también acusarán la ausencia de su ingeniero de carrera, Leena Gade, que ha dimitido tras las 24 horas de Le Mans para centrar sus esfuerzos en otra rama del grupo Volkswagen, Bentley.

Para Toyota, ésta será la oportunidad de redimirse de su descorazonador abandono en las 24 horas. Los japoneses han llevado a cabo una exhaustiva investigación para determinar qué falló en su TS050. La conclusión: un defecto técnico en un conector de la línea de aire entre el turbo y el intercooler (radiador que enfría el aire comprimido por el turbo para enviarlo al motor a una densidad óptima). Estás confiados de que esta anomalía no se repita en Alemania.

Para Porsche, Nürburgring también es una oportunidad para reinvidincarse. En las 6 horas de Silverstone y Spa-Francorchamps, fueron los prototipos más rápidos pero las averías y los errores humanos les apartaron de la victoria. En Francia, persiguieron sin descanso a Toyota desde el anochecer hasta la bandera cuadriculada, pero sólo la avería de los nipones les brindó la oportunidad de asaltar la primera posición.

Por lo que respecta a la LMP2, Roberto Merhi volverá a acaparar los focos. El castellonense fue el piloto más rápido de su categoría en Le Mans. Nadie superó su vuelta rápida. Este dato, sumado al brillante ritmo que acreditó a los mandos del Manor, inspiran confianza en sus opciones para el fin de semana. La brevedad de la carrera podría reducir el impacto de las limitaciones de sus compañeros, y con ello permitirle aspirar a un resultado mejor.

Pero si en LMP1 y LMP2 las historias tratan de rivalidades y coches endiablados, más polémica y política hay en la GTE-Pro y la GTE-Am. Existe un fuerte malestar contra Ford. Los fabricantes tienen la sensación de que la marca del óvalo ocultó rendimiento en Le Mans para que no la perjudicaran con el Balance of Performance. La FIA ha intervenido y ha reducido el lastre de los Porsche y de los Corvette en 15 y 20 kilos respectivamente. Aston Martin podrá ampliar en 0’4 milímetros su toma de aire, 0’2 milímetros en el caso de Porsche.

Con todo, las 6 horas del Nürburgring brindan la oportunidad de disfrutar de los mejores prototipos del mundo en uno de los escenarios por excelencia del automovilismo internacional. Con tres fabricantes muy próximos en prestaciones, la victoria se decidirá por pequeños detalles. Los accidentes, los errores humanos y las averías serán, una vez más, los jueces del Mundial de Resistencia.