Toyota ya prueba en carretera la batería de estado sólido

El LQ Concept debutó en 2019 como un prototipo eléctrico que introducía el nuevo asistente de la marca, llamado Yui y capaz de anticiparse a las necesidades del conductor. Una plataforma tecnológica que todavía no se ha materializado en un vehículo de producción.

Ahora bien: en los últimos días este coche ha regresado a la palestra en un vídeo divulgado por Toyota donde luce el mensaje 'Powered by All-Solid State Battery' –Propulsado por una Batería de Estado Sólido– escrito en un lateral.

Y este mensaje es especialmente relevante porque esta misma semana Toyota ha confirmado que ya ha empezado las pruebas en carretera de su batería de estado sólido, que si nada se tuerce llegará al mercado automovilístico en 2025.

Estamos pues ante el coche que serviría de conejillo de indias para el desarrollo de esta tecnología, que promete una autonomía superior, tiempos de carga más rápidos y un precio más competitivo que las soluciones convencionales.

La batería de estado sólido forma parte de una estrategia de Toyota para invertir unos 11.000 millones de euros en el desarrollo de baterías durante el periodo 2021-2030. La marca espera que a finales de décadas las baterías cuesten la mitad que en 2022.

El LQ Concept es un prototipo con una aerodinámica muy trabajada, ruedas traseras carenadas incluidas.

Al margen de la batería, su punto estrella es Yui, nombre con el que ha quedado bautizado el asistente a la conducción inteligente del prototipo. Yui puede analizar al conductor para posteriormente prevenir sus necesidades. De esta forma, la firma japonesa pretende ofrecer una experiencia de movilidad completa y personalizada. Yui es capaz de actuar sobre la iluminación del habitáculo, sobre la climatización, sobre las fragancias o incluso sobre la música. Por si fuera poco todo esto, Yui también puede ofrecer informaciones de diferente índole en tiempo real al conductor.

El Toyota LQ Concept ofrece un Nivel 4 de conducción autónoma, de tal forma que es capaz de desplazarse totalmente por sí mismo en determinadas circunstancias. Para ello cuenta con una red de cámaras, sensores y radares que componen una imagen de la carretera por donde el coche circula a partir de la cual éste se desplaza e incluso puede llegar a estacionar. Los peligros que acechen en la vía llegan en forma de imágenes en 3D. Además, los faros presentan un sistema DMD basado en espejos que sirve para mantener siempre la iluminación adecuada sobre la carretera sin llegar a deslumbrar.

Toyota LQ Concept en su presentación.

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