Los puntos de recarga pública de Barcelona pasan a ser de pago

Los puntos de recarga públicos de Barcelona que hasta ahora eran gratuitos dejarán de serlo el próximo lunes, 18 de enero. Así lo han afirmado medios locales, que citan fuentes cercanas a los mandamases de la zona a la hora de justificar esta decisión. El objetivo oficial que se persigue es el de promover un uso responsable y sostenible de la energía, además de tener capacidad económica para prácticamente doblar el número de puntos de aquí a 2024, año en el cuál se prevé llegar a los 1.000 –actualmente hay 512–.

Las tarifas a pagar por utilizar los puntos de recarga eléctrica variarán en función del tipo de usuario y de vehículo. No será el mismo coste el que tenga que afrontar un particular que una flota profesional, como tampoco lo será la factura a abonar por un coche o una moto. También influirá en el precio si el punto de carga se encuentra en la calle o en un parking, aunque en todo caso habrá que realizar una recarga mínima que también será variable.

Está previsto, según informa Europa Press, que los particulares que utilicen habitualmente estos puntos de carga tengan una suscripción inicial de 50 euros para los coches y 25 para las motos, mientras que para las flotas profesionales será de 100 euros. El coste de la energía variará además en función del horario, y se prevé que se muevan entre 0,22 y 0,49 euros el kilovatio hora. Obviamente será más barato durante la noche.

En la actualidad se contabilizan más de 5.000 usuarios de estos puntos de recarga pública, utilizados tanto por coches eléctricos como por híbridos enchufables. De los 512 existentes, 367 están situados en aparcamientos municipales gestionados por B:SM –Barcelona Serveis Municipals– y los 145 restantes en la vía pública. De todos ellos, 25 son de carga rápida con una potencia máxima de 50 kilovatios.