Insanity tiene dos motores de avión y parece un Ferrari Enzo
Estados Unidos es un paraíso de las preparaciones extremas y para muestra un botón. Este prototipo, de nombre Insanity (no había uno mejor), esconde bajo una silueta de un Ferrari Enzo un espectacular conjunto mecánico formado por dos motores de avión. Sólo con estos ingredientes es palpable que detrás de este coche hay una historia y un dueño un tanto peculiares.
El Insanity es un vehículo que intenta emular a los 'jetcar', coches muy populares en Estados Unidos. Así lo confiesa Ryan McQueen, autor de este prototipo. Con todo, el objetivo de este pequeño 'loco' no era crear un 'jetcar' más y por ello decidió que el diseño exterior emulase de alguna forma el diseño del Ferrari Enzo. Lo cierto es que en cierta manera lo consiguió, aunque para ello trabajó durante cinco años para dar con el diseño aerodinámico que pudiera encajar en la silueta del Enzo y a la vez ser efectivo.
Con todo, el mayor reto para Ryan McQueen, creador y dueño de esta máquina, ha sido dar con la solución mecánica adecuada. Desde que comenzó sus trabajos en 2004, este manitas ha probado distintas soluciones, aunque finalmente ha optado por dos motores de aviación de Rolls-Royce. Dos motores a reacción que consumen 400 litros de combustible cada dos minutos y que en teoría llevan al Insanity a los 650 kilómetros por hora. Decimos en teoría porque todavía no ha sido probado.
Al margen de la perplejidad que supone que un ciudadano pueda conseguir dos motores a reacción de semejantes características, cabe destacar que el desarrollo de Insanity no ha sido tan caro como se podría esperar. De hecho, en los 12 años que ha tardado en construir este particular prototipo, Ryan McQueen se ha gastado en torno a unos 65.000 euros en lo que son componentes, amén de las miles de hora que habrá pasado para dar vida a su particular sueño.
