Honda, abierta a alianzas para no perder el tren del coche eléctrico
Honda está dispuesta a negociar con otros fabricantes para establecer una alianza que consiga abaratar la producción de coches eléctricos.
La transición eléctrica ha propiciado que los grandes fabricantes tiendan a la estandarización y a la sinergia para afrontar el coste de Investigación y Desarrollo que implica la nueva movilidad.
El ejemplo más claro es Stellantis, fruto de la fusión del Grupo PSA y de Fiat-Chrysler. Lo que antes eran dos gigantes independientes ahora es una única entidad con cuatro plataformas y tres motores eléctricos para todo el grupo.
Y es aquí donde entra Honda, que en estos momentos es el décimo fabricante de automóviles más valioso del mundo.
La marca japonesa está sola, porque bajo su paraguas tan sólo cuenta con Honda y Acura. Quizá demasiado sola. Por eso sus directivos abren la puerta a acercar posiciones con otras compañías.
Preguntado por el futuro de la electrificación, el nuevo director ejecutivo de Honda, Toshihiro Mibe, ha dicho que "si con una alianza podemos alcanzar pronto lo que queremos conseguir, entonces estaríamos dispuestos a tejer una alianza".
Mibe añade que "construir una alianza sería realmente importante para incrementar el número de vehículos eléctricos, considerando que en estos momentos la electrificación no es viable comercialmente".
Palabras que sugieren que están dispuestos a estrechar lazos con otros fabricantes, aunque en principio sin renunciar a la independencia de la compañía.
Lo que está claro es que tendrá que acelerar sus planes. Honda está centrada en los híbridos y quiere mantener el motor de combustión hasta 2040, pero en Europa y el Reino Unido no se podrán vender coches con emisiones a partir de 2035.
Honda tiene un acuerdo con General Motors para crear dos coches eléctricos para Estados Unidos. También ultima una nueva plataforma específica para esta tecnología, aunque llegará a mediados de década. Hay que pisar el acelerador.
