VIDEOJUEGOS

GRID: un retorno plagado de acción al volante

14/10/2019 13:16

La saga GRID se estrena en la actual generación de videoconsolas con una propuesta donde prima la conducción arcade y en la que destacan la variedad de coches y pistas en la que desarrollar la acción.

Cinco años hemos tenido que esperar hasta que la cuarta entrega de la saga GRID ha salido a la venta. De hecho, se trata de la primera que vemos en la actual generación de videoconsolas. PlayStation 4, Xbox One y PC reciben un juego que, de nuevo, apuesta por una conducción arcade y frenética en la que la acción pura y dura prevalece sobre la profundidad que ofrecen otros juegos de carreras.

A pesar de los años que han pasado desde la última entrega, el nuevo GRID de Codemasters, que también son responsables de la saga F1, presenta luces y sombras. Entre las primeras aparecen la gran cantidad de coches a pilotar. Son unos 70 y de muy diferentes clases. Podemos ponernos al volante del 'muscle car' más americano o del Renault R26 que hizo campeón del mundo a Fernando Alonso por segunda vez. El asturiano, por cierto, ha ejercido como consultor del juego.

Respecto a los escenarios donde se desarrollan las carreras hay que confirmar que son doce. Pueden parecer pocos, pero una vez se profundiza en el juego se ve que no es así. ¿Por qué? Cada uno de ellos presenta diferentes pistas hasta llegar a un total de 80. De esta manera, podremos recorrer ciudades como San Francisco o Tokio de diferentes maneras, además de circuitos reales como el de Silverstone.

Otro de los puntos de interés del nuevo GRID es la inteligencia artificial de los pilotos controlados por la computadora. Existen hasta 400 tipos de comportamientos diferentes que hacen que cada carrera sea distinta a la anterior por los adversarios contra los que nos enfrentamos. Además se ha incorporado un sistema llamado Némesis que nos hará ganarnos rivales especiales si nuestras escaramuzas en la pista nos llevan a tener encontronazos repetidos con un determinado piloto.

Por desgracia, el devenir de las partidas saca a relucir una de las pegas que tiene GRID, y es que no se aprecia una progresión del juego como tal. Tenemos una serie de campeonatos distribuidos en clases que debemos completar poco a poco. Según triunfemos, ganaremos dinero para comprar nuevos coches y competir en otras categorías, un poco al estilo de lo que sucede en Gran Turismo. En el caso de que no nos llegue con lo ahorrado, tocará repetir campeonato. Y así hasta completar todo.

Tampoco destaca especialmente el modo online, puesto que tan sólo se ofrecen de momento las opciones de partida rápida y privada. En el primer caso será el juego el que elija el circuito y las reglas de la carrera, mientras que en el segundo seremos nosotros los que decidamos en qué condiciones vamos a correr.

Estamos por tanto ante un videojuego de conducción ideal para jugadores que no están especialmente curtidos en este género. Los que sí lo estén encontrarán también diversión, pero seguramente echen en falta una vuelta de tuerca que Codemasters debería dar en el caso de que dentro de un tiempo llegue una secuela.

GRID se encuentra ya a la venta en tiedas físicas y online especializadas por un precio de partida de 69,95 euros en el caso de las versiones de PS4 y Xbox One y de 49,95 para la de PC.