¿Es posible el regreso del Lancia Delta Integrale?
Es todavía un rumor y poco probable. Sin embargo, un sector de las altas esferas del Grupo FCA (Fiat - Chrysler) creen que la única solución a la maltrecha situación de Lancia es devolver a la vida a su mayor éxito. Lancia no pasa por su mejores momentos y el prestigioso fabricante italiano apenas sobrevive a base de ediciones especiales del Ypsilon, producto insuficiente de una marca llamada al lujo y de realidad nula.
Sobre el papel, el eventual regreso del Lancia Delta Integrale parece complicado. En primer lugar porque Fiat con Sergio Marchionne a la cabeza está inmersa en una reestructuración profunda. El objetivo es devolver a su plenitud a Alfa Romeo y dibujar en la marca italiana un alternativa real a las marcas premium alemanas. Además, un nuevo Delta Integrale entraría en conflicto directo con el Alfa Giulietta y parece que Sergio Marchionne tiene claro el camino a seguir. En ese camino, Lancia está casi desterrada.
En cualquier caso, tampoco sería fácil conseguir en un vehículo moderno la esencia del Lancia Delta Integrale original. Considerado por muchos el mejor compacto deportivo de la historia, su etapa más resplandeciente llegó en la década de los 80. Su vida se prolongó hasta 1994, cuando se acabó su fabricación. Ligado siempre a la competición, hasta casi ser inseparable de la misma, muchos quedaron enamorados de aquellos Delta Integrale HF, los Integrale 8V y 16 V o los Integrale Evoluzione.
No obstante, poder conducir el vehículo que triunfaba en el Mundial de Rallyes no era algo común. Mientras que el modelo de calle servía para cumplir con la homologación competitiva, el Lancia Delta Integrale se convertía en leyenda en el Mundial de Rallyes. De hecho, estamos hablando de un modelo que consiguió seis títulos consecutivos de fabricantes y que hasta 1992 sumó 46 triunfos en rallyes del WRC. Y es que el idilio de Lancia con el Mundial de Rallyes no fue cosa de un día, como demuestran su Grupo B, el Lancia 037 o el Lancia Stratos.
