El Cupra Ibiza, cancelado de forma oficial

A pesar de existir un prototipo que parecía destinado a ponerse tarde o temprano a la venta, el Cupra Ibiza no se va a hacer realidad. Así lo ha confirmado Luca de Meo, presidente de Seat, que ha apuntado a las dudas acerca de la viabilidad económica del proyecto como responsables de su cancelación.

La idea era que el Cupra Ibiza fuese una referencia entre los utilitarios deportivos, con lo que a la marca no le bastaba equipar el motor de 2.0 litros turbo que impulsa al Volkswagen Polo GTI. Eso hubiese implicado que el coste del coche fuese mayor que el del modelo alemán, con lo que el nicho de mercado al que se hubiera dirigido hubiese sido realmente pequeño. Según Luca de Meo, "en términos de volumen es un mercado muy específico para un par de países".

En otras palabras, las ventas que hubiese obtenido el Cupra Ibiza en los países a los que se refiere Luca de Meo no serían en ningún caso suficientes como para que el modelo fuese rentable para la marca. Además, en una época en la que manda la electrificación, Seat y Cupra están de acuerdo en que un utilitario de este carácter impulsado por un motor de combustión no es lo más adecuado. De esta forma, Cupra se queda en cartera con dos modelos, el León, aún bajo el paraguas de Seat, y el Ateca.

De ahora en adelante Cupra tiene dos frentes en los que centrarse. El primero es el Cupra Formentor, que equipa una mecánica híbrida enchufable que presumiblemente también veremos en la nueva generación del León. El segundo es el Cupra Tavascan, el eléctrico recientemente presentado que se edifica sobre la plataforma MEB.

De Meo, por último, ha avisado además que alguno de los próximos lanzamientos deportivos del Cupra tiene muchas posibilidades de ser totalmente eléctricos. "Nuestro próximo 'hot hatch' podría venir sin humo del escape".