Cómo desmontar un Jeep en menos de un minuto
Los vehículos modernos son cada vez más complejos. Esto supone un mayor esfuerzo a los mecánicos que, quizás dentro de unos años, necesitarán un máster en ciencias de la computación para resolver el menor de los problemas. La situación también afecta al usuario, ya que implica no poder hacer pequeños arreglos en casa y tener que llevar el coche a un especialista con herramientas especiales. Sin embargo, hace poco más de medio siglo, los diseñadores de los fabricantes dedicaban más tiempo a facilitar las tareas de reparación y mantenimiento para que desmontar un automóvil fuese algo que pudiese realizar casi cualquier persona.
Por ejemplo, esto no es un inconveniente para quienes todavía hoy conservan un Jeep clásico. Si no lo crees, te invitamos a que mires el siguiente vídeo, donde un equipo de ocho militares canadienses se hacen con todo un Serie CJ sesentero y lo desarman en algo menos de un minuto. Claro está que se trata de hombres preparados y entrenados para este tipo de labores, pero os podemos asegurar que el mejor octeto de mecánicos –y bien fornidos– no podrían desmontar un Wrangler moderno en el mismo tiempo. Puede que tardasen hasta diez veces más a pleno rendimiento. Ni siquiera un coche de competición actual permite hacer esto.
Como podemos observar, primero desconectan la campana de admisión y el escape, luego sale el radiador y a continuación la carrocería. Para entonces, el grupo ya ha conseguido reducir el todoterreno a un simple "chasis rodante", pues todavía conserva su motor, transmisión y ruedas, todo ello en 30 míseros segundos. Tras quitar un par pernos, los ejes delantero y trasero se desprenden, dejando espacio suficiente como para que cuatro miembros del equipo coloquen dos grandes postes en los arneses del propulsor y lo extraigan de la plataforma. Ya sólo queda desatornillar las llantas y es precisamente ahí cuando termina el espectáculo.
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